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El Real Madrid Castilla, campeón de Segunda B
Vuelve a golear al Mirandés en Anduva y termina la temporada como el mejor de la categoría
El Real Madrid Castilla se ha proclamado campeón de la Segunda División B tras ganar al Mirandés en Anduva en la vuelta de la final por 0-3.
La empresa se antojaba difícil para los rojillos antes incluso de empezar el encuentro, ya que el 3-0 cosechado por los de Toril en el partido de ida parecía ventaja suficiente para afrontar la vuelta con garantías.
Aún así, la afición mirandesista está enganchada a las gestas y, a pesar de la escasa trascendencia del encuentro tras haber cumplido el objetivo del ascenso, Carlos Pouso alineó un once inicial planteado para presentar batalla, con la ausencia obligada de Martínez, lesionado de gravedad en el partido de ida.
Lejos de cumplir con el guión esperado para los intereses rojillos, el encuentro se puso cuesta arriba desde los primeros minutos. Tras un par de intentos fallidos, Denis encontró el camino por la banda izquierda, abriendo un balón que recibió Morata en la frontal para ponerla en el palo izquierdo sin que Nauzet pudiera hacer nada por evitarlo.
Así, 0-1 en el marcador, 4-0 en el conjunto de la eliminatoria e historia resuelta para el Castilla, que apenas tuvo que hacer nada para mantenerse en la línea de la victoria.
Cierto es que el Mirandés dispuso de varias ocasiones durante la primera parte, algunas de ellas bastante claras, pero la presencia de Mejías en la puerta, la mala puntería y el cansancio acumulado durante la temporada impidieron a los rojillos empatar el partido.
El Castilla, en cambio, no necesitó tanto para crear peligro. Siguiendo el ejemplo del primer equipo, sus ocasiones se convierten en gol con gran facilidad, y así, en el minuto 41, Joselu sentenciaba el partido rematando a placer un pase en posible fuera de juego reclamado por los jugadores y la afición rojilla.
Tras el paso por los vestuarios, el partido continuó por los mismos derroteros que en la primera parte, quizá con un punto más de intensidad por parte del Mirandés, pero con menor número de ocasiones.
Por su parte, el Castilla siguió a lo suyo, esperando atrás y saliendo a la contra en tromba, generando varias ocasiones de peligro, como la protagonizada por Morata , que enviaba el balón al palo en el 62.
Sin embargo, el partido ya estaba muerto con un contundente 5-0 en la eliminatoria a favor del Castilla, resultado que todavía se vería incrementado en el minuto 87 cuando Joselu marcaba un penalti provocado por Nauzet, expulsado con roja directa.
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