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¿Cuál es la dieta de un candidato a la presidencia de Francia?

El régimen del presidente Sarkozy es secreto de Estado mientras que al socialista Hollande le gusta saborear una dorada «Royale»

¿Cuál es la dieta de un candidato a la presidencia de Francia? j. p. q.

juan pedro quiñonero

¿Qué come un candidato a la presidencia de la República francesa, horas antes de un mitín decisivo para su carrera?

En el caso de Nicolas Sarkozy , el régimen del presidente candidato es un secreto de Estado al que solo tienen acceso Carla Bruni y los cocineros del Elíseo. El candidato socialista François Hollande , cuando se encuentra en París, como este sábado, en vísperas del gran mitín de la batalla de París, come y cena pescado con ensalada, legumbres o pastas, en un restaurante italiano (napolitano) a doscientos metros de su cuartel general.

Poco después del mediodía, Hollande tardó unos 45 minutos en degustar con mucha calma una dorada «Royale» con pastas, con agua mineral italiana, con burbujas, acompañado de su guardia pretoriana personal, encabezada por Manuel Valls y Pierre Moscovici . El «Royale» de la dorada le debe recordar a su exesposa y madre de sus hijos, comenta un señor muy puesto, con una brizna de ironía malévola. Segolene Royal, que aspiró a la nominación socialista, es la exmujer de Hollande.

Tras la comida, en el Elíseo, Sarkozy se reposa media hora en una habitación que está a dos pasos del antiguo dormitorio de Eugenia de Montijo , la española (granadina) que fue la última emperatriz de Francia, esposa de Napoleón III. Antes o después del descanso, Sarkozy y Carla Bruni pueden dar un breve paseo por los jardines del palacio presidencial, acompañados de dos o tres teléfonos móviles.

Hollande, por su parte, da un pequeño paseo, en compañía de Valls y Moscovici, entre el restaurante que le sirve de cantina y el despacho desde donde dirige su campaña. Hollande tampoco gusta de ser fotografiado mientras come. Olímpico, acepta un brevísimo «shotting» mientras camina con la lentitud y pompa propia de quien creer caminar hacia el Elíseo.

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