Suscríbete
Pásate a Premium

LIBROS

Toda la polémica sobre Eugenia Rico

Entre elogios desmesurados que no se corresponden con la realidad, «El fin de la raza blanca» (Páginas de Espuma), primer libro de relatos de Eugenia Rico, ha desatado la polémica

Toda la polémica sobre Eugenia Rico ABC

ANTONIO FONTANA

Eugenia Rico (Gijón, 1972) es autora de cinco novelas – Los amantes tristes (2000), La muerte blanca (Premio Azorín 2002), La edad secreta (finalista del Premio Primavera 2004), El otoño alemán (Premio Ateneo de Sevilla 2006) y Aunque seamos malditas (2011)– y un ensayo: En el país de las vacas sin ojos (Premio Espiritualidad 2005). Su primer libro de relatos, El fin de la raza blanca , viene acompañado de una faja plagada de elogios : «La Virginia Woolf de la era Facebook» , según The New York Times ; «La gran escritora del siglo XXI», asegura Der Spiegel ; «La nueva estrella de la literatura en español», proclama Deutschland Kultur Radio.

«La gran voz del siglo XXI»

A estos elogios habría que añadir los del escritor germano-austriaco Daniel Kehlmann , padrino literario de la autora en Alemania, donde Aunque seamos malditas ha sido un bombazo, y los del norteamericano Gore Vidal , que desde la contraportada de El fin de la raza blanca se une a la fiesta con estas palabras: «Eugenia Rico puede ser la gran voz del siglo XXI». Lo que, en realidad, no quiere decir nada: que alguien pueda ser «la gran voz» no significa que llegue a serlo . Olvidemos, por tanto, a Gore Vidal, quien, bien mirado, no se compromete en absoluto.

¿Merecen tantos elogios estos relatos? La respuesta es no. Un no rotundo

Olvidemos, también, los elogios que comparan a Eugenia Rico con Virginia Woolf: al parecer, la prestigiosa y feroz crítica del New York Times Michiko Kakutani no escribió la reseña que dicen que escribió, tal como ha destapado el blog literario Patrulla de Salvación y ha confirmado la propia Kakutani. Dicho de otra manera: el artículo que proclama a Eugenia Rico como la moderna Virginia Woolf es falso . ¿De dónde habrá salido? Misterio misterioso.

Dejemos a un lado, pues, a Kakutani, el New York Times , Virginia Woolf y Gore Vidal, y centrémonos en El fin de la raza blanca , que es lo que toca. Saber si las historias que contiene justifican tantos elogios.

La respuesta es no. Un no rotundo. Porque en ocasiones la prosa de estos relatos recuerda a la de una redacción escolar . Porque muchas de sus tramas, que quieren ser terribles, son tremendamente planas. Y porque algunas de sus imágenes están escogidas con pinzas (ay, ese retrete «abierto como los misterios de la vida»).

Astillas de tierra

Además, ciertas escenas rozan la cursilería : «Luego [...] extendimos [la chaqueta] en el suelo y nos juntamos con violencia, para que la tela se impregnase para siempre de la sustancia agridulce de su cuerpo y de la humedad oscura de mis lágrimas». Y, por si fuera poco, la puntuación deja bastante que desear , y les voy a ahorrar los ejemplos, que sí, son culpa de la autora, pero también de la mala edición del libro.

Hay cosas destacables, justo es reconocerlo. Ese atropello que se resume en dos frases: «Selena no oyó el frenazo. La boca se le llenó de astillas de tierra y los ojos de telarañas». Y el primero de los cuentos, «La cucharilla», un microrrelato de lo más inquietante .

Volvamos al principio: «La gran escritora del siglo XXI», «La nueva estrella de la literatura en español»...

Conclusión número uno : puede que esos elogios se refieran a la Eugenia Rico que ha escrito cinco novelas y un ensayo; desde luego, a quien no se refieren es a la Eugenia Rico de El fin de la raza blanca , su «esperadísimo» libro de cuentos, según la página web de la editorial.

Conclusión número dos : hay elogios que los firma el diablo.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación