Debate tras el funeral de Lucio Dalla, «ejemplo de lo que significa ser gay en Italia»
Polémica sobre la hipocresía y doble moral italiana, a propósito de la homosexualidad del cantautor, creyente y cercano al Opus Dei

Los funerales de Lucio Dalla son «uno de los ejemplos más fuertes y evidentes de lo que significa ser gay en Italia», ha manifestado una conocida presentadora de la televisión italiana, Lucia Annunziata, expresidenta la RAI (Radiotelevisión pública italiana).
Lucio Dalla, que el domingo habría cumplido 69 años, el poeta de la música, que murió el jueves de un ataque al corazón en Montreaux (Suiza) fue despedido en su ciudad, Bolonia, por amigos, artistas, políticos de todo el arco parlamentario y gente común, en total unas 6.000 personas en la iglesia de San Petronio, y otras 50.000 se quedaron fuera, en la «plaza grande» que él había cantado y hecho famosa.
Durante el funeral, en el que no se permitió que sonaron sus canciones, su compañero Marco Alemanno , actor y cantante, de 31 años, con el que vivía desde hace años, leyó una declaración de amor , terminando en lágrimas, entre la emoción y aplauso general, incluyendo seguramente el de los miles telespectadores de toda Italia que siguieron en directo la ceremonia.
En ese clima de emoción general de los italianos despidiendo un «caro amigo», Lucia Annunziata, a la que después se han unido
«Te entierran con el rito católico, basta que no digas que eres gay»
otras voces, fue la primera en romper un tabú, una cortina de silencio, declarando en su programa de la RAI: «Los funerales de Lucio Dalla son uno de los ejemplos más fuertes de lo que significa ser homosexual en Italia : Vas a la iglesia, te conceden los funerales y te entierran con el rito católico, basta que no digas que eres gay. Es el símbolo de lo que somos: Existe el permisivismo, siempre y cuando se mire hacia otra parte».
De Marco Alemanno se hablaba en los medios italianos como amigo y colaborador de Lucio Dalla. Ha sido el joven actor y cantante el que ha roto ese velo de hipocresía, según afirma el diario «La Repubblica» : Con la compostura, el dolor y la legitimidad de un viudo, el joven Marco Alemanno ha hecho publico homenaje a si hombre y maestro Lucio Dalla en la iglesia de San Petronio.
Dalla, creyente cercano al Opus Dei
Lo que muchos italianos llaman hipocresía o doble moral a propósito de Lucio Dalla está suscitando polémica y fuerte debate en Italia, teniendo en cuenta la gran popularidad de Lucio Dalla y sus creencias. El cantautor, respetado y admirado por gentes de diversa cultura política y fe religiosa, se declaraba un profundo creyente.
En la Navidad del 2007, en la web católica Petrus, Lucio dalla reveló ser un devoto de San Josemaría Escrivá de Balaguer por su lógica del trabajo: «Yo creo en la búsqueda de lo bello, en la santidad y en la mística del trabajo, lo que quiere decir santificarse por medio de la profesión de cada uno» . El cantante iba a misa, rechazaba el aborto («la vida se debe defender siempre»), y buscaba a Dios («la búsqueda de lo divino y de la trascendencia forman parte de la naturaleza humana»).
En la polémica ha intervenido también Pippo Corigliano, que fue durante más de 40 años portavoz del Opus Dei: «Lucio Dalla era extremadamente humano, tocaba todas las cuerdas del corazón, como le gustaba a San Josemaría. La estima que Dalla tenía por el trabajo cotidiano, bien hecho, coincide con la enseñanza de San Josemaría». «Las vías del Señor son infinitas» , observa finalmente Corigliano.
En definitiva, se seguirá hablando largo tiempo de Lucio Dalla, cuya muerte y funerales han puesto de actualidad la famosa moral a la italiana que dice así: «Se hace, pero no se dice» . El ejemplo más lamentable de ese proceder lo denunció hace unos años un programa de televisión, demostrando que un tercio de los diputados italianos se drogaban, un escándalo que levantó ampollas, pues poco antes los parlamentarios habían aprobado una dura ley contra la drogodependencia.
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