Más de un centenar de muertos por el terremoto en Turquía

Más de un centenar de personas han muerto en la localidad de Ercis, una de las más afectadas por el fuerte terremoto de este domingo en Turquía, según las estimaciones de una de las enfermeras que trabaja en el lugar. Esta cifra duplica la cantidad difundida por la agencia de noticias Cihan. "Habrá más de un centenar de cadáveres junto al hospital. Los hemos tenido que dejar fuera porque está oscuro ya y no queremos pisarlos", ha explicado la enfermera Eda Ekizoglu en declaraciones telefónicas a CNN Turk desde la localidad, situada a unos 100 kilómetros al norte de Van.

"Uno de cada tres edificios de Ercis se ha derrumbado. No podemos contar los muertos ni los heridos porque no estamos dentro del hospital", ha añadido. El personal sanitario está trabajando en plena calle ante la imposibilidad de acoger a todos los heridos por el seísmo en el interior de las instalaciones hospitalarias y por los daños sufridos en estos edificios. "El hospital ha quedado gravemente dañado, así que no podemos operar dentro", ha explicado Ekizoglu. "Estamos prestando atención en el jardín del hospital y en un edificio cercano abastecido con un generador", ha indicado.

El temblor de tierra, de 7,2 grados en la escala de Richter ha sacudido este domingo la provincia turca de Van, fronteriza con Irán, y medios locales informan de que se ha desplomado al menos un edificio de siete plantas bajo cuyos escombros han quedado atrapadas varias personas.

El epicentro se ha localizado a 35 kilómetros al noreste de la ciudad de Van, cerca de la frontera con Irán, ha informado el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). El seísmo se ha producido a las 10.41 horas GMT y el instituto sismológico Kandili, de la Universidad del Bósforo en Estambul, ha asegurado que se dio «muy cerca de la superficie», a unos 5 kilómetros de profundidad, por lo que en el epicentro «se sintió como un seísmo de entre 8 y 9 grados».

En unas declaraciones a la cadena «NTV», el alcalde del distrito de Ercis, Zülfikar Arapoglu, aseguró que hay «muchos muertos y heridos», y pidió ayuda urgente. El alcalde de la ciudad de Van, Bekir Kaya, en unas declaraciones a la misma cadena, hizo un llamamiento a mantener «la sangre fría», debido al pánico que ha provocado el terremoto y que ha causado que muchas calles queden colapsadas por vecinos que tratan de huir de la zona, lo que dificulta la llegada de las ambulancias.

El viceprimer ministro turco, Besir Atataly, dijo que todas las instituciones del Estado se encuentran en estado de alarma y que se establecerá un centro de coordinación en Van.

Ver mapa más grande