Maria de Belém Roseira se convierte en la primera presidenta del Partido Socialista portugués

Maria de Belém Roseira es desde hoy la nueva presidenta del Partido Socialista (PS) portugués, sustituyendo a Antonio de Almeida Santos, quien ocupaba el puesto desde 1992. Se convierte así en la primera mujer que asume el cargo , dieciséis años después de su debut en una función gobernativa. Los delegados del XVIII Congreso Nacional del PS, celebrado este viernes en Braga para definir el socialismo post-Sócrates, la han elegido por amplia mayoría: 746 votos favorables en una votación en la que han participado 788 delegados.

Militante socialista desde 1976, hasta ahora líder parlamentaria interina, ha sido propuesta por el secretario general del PS, Antonio Seguro. Maria de Belém ejerció funciones como ministra de Sanidad de 1995 a 1999 y ministra de la Igualdad de 1999 a 2000, siempre con Antonio Guterres como primer ministro. Fue vicepresidenta (1997) y presidenta (1999) de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud. Licenciada en Derecho en la Universidad de Coimbra, lleva trabajando desde 1973 para el servicio público ocupando muy diversas funciones.

Son conocidas sus convicciones religiosas y a la vez que se afirma socialista asegura que es “profundamente cristiana” . Se caracteriza por su inmensa capacidad de negociación y por tratar todos los asuntos de forma muy frontal. Dicha frontalidad la ha mantenido bastante alejada del ex primer ministro José Sócrates durante sus siete años de gobierno. Apoyó la candidatura de Manuel Alegre para secretario general de su partido.

Ha sido siempre una mujer independiente de los grupos y tendencias internas del PS, y en muchas ocasiones no ha sido muy clara con sus posiciones internas. Asume a sus 62 años un nuevo desafío: el de presidir un partido que pasa por un momento de reestructuraciones . Una generación de nuevos dirigentes con peso propio piden paso, miran hacia el futuro sin olvidar que les esperan años difíciles en la oposición. Tal y como ha explicado la nueva presidenta, sustituir a Almeida Santos en el cargo es un orgullo y espera un partido unido. «Toda mi vida trabajé para lanzar energías positivas en la construcción y no en la división», subrayó.