«Saco mis demonios con la música»
Lila Downs, una de las grandes atracciones del ciclo
La mexicana Lila Downs, a quien Chavela Vargas ha señalado como su sucesora, regresa este verano a su querida España para girar con su repertorio habitual y presentar en primicia alguno de los temas de su nuevo disco, «Pecados y milagros», que verá la luz en noviembre.
–¿Qué nos puede adelantar del álbum?
–Cantaremos algunos de los temas para ver cuál es la reacción del público. «Pecados y milagros» sale inspirado por el arte «novohispano» de México, que son los retablos que se montan por una manda y luego se llevan a la iglesia cuando ésta se cumple. Los «pecados» están presentes en el disco porque hoy en día estos retablos llevan historias que son muy libres a interpretación, podrían ser pecados o podrían ser milagros. Para mí es muy interesante explorar esa moralidad de los mexicanos.
–Hablando de moralidad y de mexicanos, ¿qué es lo que sucede allí con la violencia? ¿Cómo vive la situación actual de su país?
–Las noticias son graves y serias, pero los seres humanos también tendemos a mirar las cosas que son negativas, incluso en los medios. En México seguimos nuestra vida diaria, aunque nos afecta en nuestro sentir diario lidiar con un tema que compete al futuro del país, pues no sabemos si va a empeorar la situación. Los artistas también estamos involucrados y debemos ver de qué manera podemos crear conciencia y unión. Si invirtiéramos un poco más en la educación, quizás los jóvenes no estarían tan metidos en el crimen.
–¿Qué tiene de diferente la Lila Downs de «Ofrenda» y la de «Pecados y Milagros»?
–Era más joven y veía la vida de una manera más dramática, tenía más oscuridad en la poesía que escribía. En «Ofrenda» veía la gran injusticia a mi alrededor. Ahora, en «Pecados y Milagros», sigo siendo consciente de estas realidades, pero también veo la luz de la vida. Los conciertos serán un poco más alegres, al mismo tiempo que melancólicos, y antes eran más trágicos.
–«Ojo de Culebra», su anterior disco, estaba dedicado a las curanderas. ¿Qué efecto tiene la música en usted?
–Es una sanación espiritual necesaria para seguir creciendo como ser humano. Yo saco mis demonios con la música.
–«Yo ya me voy porque los años pasan, pero viene en lugar mío una señora Lila Downs». Con estas palabras se refería a usted la gran Chavela Vargas, ¿qué tiene que decir al respecto?
–Es un cumplido muy grande y se lo agradezco mucho. Ella es una mujer muy fuerte, a la que admiro muchísimo. Pero nadie se puede comparar a ella, es única.
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