El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido subir los tipos de interés de la zona euro en un cuarto de punto, hasta el 1,25%, después de casi dos años en mínimos históricos, como ya había descontado el mercado después de que su presidente, Jean Claude Trichet, reconociera hace una mes que este incremento era «posible». Con esta decisión, los tipos de interés abandonan su nivel más bajo de la historia, donde permanecían desde el mes de mayo de 2009 con el objetivo de apoyar la recuperación de la economía de la eurozona.
Trichet ha evitado hablar sobre la posibilidad de que la crisis de deuda arrastre a España
Ante las preguntas sobre si esta decisión contribuirá a hacer «más profundo el agujero» de Grecia, Irlanda, Portugal y, potencialmente, España, el presidente del BCE no se ha salido de su discurso y ha esquivado hablar de nuestro país. Trichet se ha esforzado en recordar los problemas que la alta inflación trae a las economías (problemas que en España palidecen frente al desempleo y el escaso crecimiento) y ha repetido que «toda la economía se beneficia de que no suba la inflación». El presidente de la entidad monetaria ha recordado su posición «como responsable de la estabilidad de precios para 341 millones de personas».
Subida pese a Portugal
Los tipos abandonan su nivel más bajo de la historia y afectarán a las hipotecas
Alemania sí está a favor de una subida de tipos, para evitar calentamiento de su economía
Presiones inflacionistas
La subida de precios en el sector de la energía ha traído presiones a la eurozona, elevando la inflación hasta un 2,6% en marzo, el máximo en dos años, cuando el mandato que se ha marcado el BCE es mantenerla en el plazo medio por debajo del 2%.
El indicador de referencia para los préstamos en el mercado interbancario se mantenía en el 1% desde hace 23 meses, al objeto de contribuir a que circulara el dinero e impulsar la economía de una deprimida eurozona, sumida en la peor recesión desde la posguerra. Pero si en algunos países la recuperación ha incrementado los precios, el aumento de la tasa de interés sólo puede encrespar en cambio la difícil situación económica que atraviesan Irlanda, Portugal y España, que deberán pagar intereses superiores para colocar deuda. Portugal ha concedido su derrota en su lucha contra la deuda y los datos del paro en España (20,5%) muestran una disparidad flagrante con Alemania (6,3%) lo que provoca posiciones encontradas en el consejo.
Los analistas esperaban no obstante un incremento de 25 puntos básicos y las expectativas habían llevado al euro a una cotización frente al dólar máxima en los últimos 15 meses, de en torno a los 1,43 dólares. Bancos como Deutsche Bank ya han expresado la posibilidad de nuevas subidas en tres meses, algo que parece haber examinado también el consejo del BCE.
Los economistas alemanes piden cautela al BCE con los tipos
Según el citado informe, la producción aún no ha alcanzado su capacidad normal, por más que los precios de las materias primas y los combustibles han espoleado la inflación. En general, se dice, en la zona euro no ha aumentado el peligro para la estabilidad de precios. Los institutos germanos esperan que los aumentos de tipos se produzcan paulatinamente hasta alcanzarun 2% a finales de 2012.
Cuando Trichet anunció subidas no se había producido la tragedia de Japón
Otro de los datos en consideración es la confianza económica en los 17 países que usan el euro, que descendió a 107,3 puntos en marzo desde los 107,9 en febrero, con caídas en todos los sectores excepto la industria. La confianza de los consumidores de Alemania, principal economía europea, ha recaído en marzo por primera vez después de nueve meses consecutivos de alzas.