Y 20 años después se hizo la carretera

A muchos habitantes del Valle del Tiétar les va a parecer mentira. Casi 21 años después de que los litigios judiciales paralizaran la construcción del tramo Ramacastañas-Candeleda de la CL-501, por fin se abrirá al tráfico este recorrido de 23,5 kilómetros que, entre ecologistas y municipios en desacuerdo con su trazado por temor a quedar aislados de la carretera principal, estuvo paralizado durante 14 años. Tres años después de que se iniciaran las obras, por fin, hoy será inaugurado por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera.

En febrero de 2008, la vicepresidenta del Gobierno regional y consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz; el consejero de Fomento, Antonio Silván, y el presidente de las Cortes regionales, José Manuel Fernández Santiago, ponían la primera piedra de una carretera que contaba con una inversión de 16,5 millones de euros y ha sido construida por Aldesa Construcciones. Allí se puso de manifiesto la importancia de este tramo, que mejorará la conexión de los pueblos del sur de Ávila con las comunidades limítrofes, es decir, Castilla-La Mancha y Extremadura, y potenciará el desarrollo del Valle del Tiétar.

El tramo Ramacastañas-Candeleda, que forma parte de la conexión Alcorcón-Plasencia y comunica el Valle del Tiétar con la comarca extremeña de La Vera y Madrid, cuenta con una longitud de 23,5 kilómetros, y la inversión prevista supera los 16,5 millones de euros.

Esta carretera cuenta con un largo historial de conflictos. En el año 1990 se iniciaron los primeros trámites para poder realizar esta vía y un año después se contrataron las obras, momento en que dio comienzo un largo proceso judicial con la paralización de las obras en 1992.

Diez años después, en 2002, el Tribunal Supremo emitió una sentencia que obligaba a la Junta a actuar sobre el trazado existente por no estar contemplado el nuevo en el Plan Regional de Carreteras, por lo que tuvo que incluirlo. En diciembre de 2004, la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJCyL dictó un auto en el que se manifestaba que con la inclusión de la carretera entre Ramacastañas y Candeleda en el Plan Regional de Carreteras se daba por cumplida la sentencia, y se podía proceder al desarrollo de la carretera. En septiembre de 2006, la Junta aprobó el proyecto y las obras fueron adjudicadas en mayo de 2007.

Pero esto no es todo. Desde 2008, el Ayuntamiento de Arenas de San Pedro ha llevado a cabo diversas acciones judiciales contra este proyecto, hasta el punto de solicitar «medidas cautelares» ante el TSJCyL contra las obras mientras se resolvía un recurso interpuesto por el Consistorio arenense, que considera que no se ajustaba a la normativa ambiental. Además, enunciaba que los dejará «aislados» al mejorar el acceso a Candeleda sin necesidad de cruzar Arenas.

También en Poyales del Hoyo se ha constituido una plataforma vecinal que reivindica un mejor acceso desde la CL-501 a su municipio y el alcalde de Candeleda, Miguel Hernández Alcojor (PSOE), ha trasladado a la Junta su preocupación por la seguridad vial del tramo Ramacastañas-Candeleda en una rotonda en su intersección con la de Oropesa.