Sebastián blinda el cierre de Garoña y complica el pacto energético

Se cierra. La central nuclear de Garoña «forma parte de las decisiones del pasado que no se van a tocar» y ya está. Con estas declaraciones el ministro de Industria Miguel Sebastián dinamitaba ayer uno de los pilares de la negociación abierta con el Partido Popular para llegar a un pacto de estado en materia energética. El mantra repetido por Sebastián y el coordinador de economía Cristóbal Montoro en la anterior cita era el de «negociar sin líneas rojas», sin «ideologías» y con la vista puesta en definir a largo plazo un mix energético para España.

Pero la tentación era muy grande. Sin Montoro ya en las dependencias del Ministerio Sebastián se lanzó de lleno a desvelar cuál será el futuro de la central. «En esta oferta de diálogo y de pacto energético, no hemos hablado de Garoña porque para nosotros pertenece al pasado» y recalcó que las decisiones tomadas «con anterioridad no las cuestionamos». «No hablamos de nuclear sí nuclear o nuclear no, sino de definir el traje energético de España, un mix equilibrado que cumpla los objetivos europeos», afirmó el ministro.

A cambio el ministro se mostró dispuesto a ofrecer al PP una solución a mitad de camino: «repotenciar el parque nuclear» existente de manera que «lo que se pierde por generación por el cierre de Garoña pueda ser compensado con la potencia del resto de nucleares». Un cálculo realizado en términos políticos que no parece cuadrar con las pretensiones iniciales del Partido Popular.

«Por fin, el PP se moja con propuestas concretas y cambia su actitud con respecto al compromiso europeo del 20-20-20 —reducción de las emisiones un 20%, que la demanda de energía se cubra en un 20% con renovables y que la eficiencia energética mejore un 20% en 2020—», se felicitó Sebastián, que dijo que por eso ahora pueden sentarse a hablar.

En lo que sí parecieron coincidir Montoro y Sebastián es en la necesidad de concluir el acuerdo con la mayor rapidez para dar seguridad jurídica al

sector eléctrico español. La situación es tan grave que HC Energía,Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa y E.On decidieron ayer dejar sus diferencias a un lado y enviar un comunicado conjunto a primera hora de la mañana reclamando un acuerdo que ponga fin a la incertidumbre regulatoria, que el pacto pasara por el Parlamento y que se respetara la legalidad vigente. El Gobierno y el PP recogieron el guante y acepataron conceder los tres deseos de las castigadas eléctricas que encadenan caídas en bolsa desde que la semana pasada se conopció el pacto de ambos. En julio habrá pacto de Estado, según sentenciaron Montoro y Sebastián.

Sube el butano

Y si el martes el Gobierno subía el gas natural, excluyendo este recibo del pacto energético, ayer hizo lo mismo con el butano, que se situará a partir de mañana en 84,4041 céntimos por kilogramo, lo que supone un incremento del 4,7% con respecto a abril. Este incremento se suma al aplicado en el primer trimestre del año, del 5,7%, y en enero, del 3,4%, y hace que la bombona de butano se haya encarecido un 14,4% en lo que va de año. La revisión anunciada hoy eleva, una vez incorporados los impuestos, a 12,23 euros el precio de una bombona media de butano.