La viuda del muerto que Gómez quiso imputar por la Gürtel le denuncia ante el juez

Definitivamente, la lista de 45 altos cargos o funcionarios de la Comunidad de Madrid que Tomás Gómez quería imputar por su presunta implicación en la Gürtel se le ha vuelto en contra al líder de los socialistas madrileños. Son muchos los empleados públicos que durante estas semanas se han planteado denunciar al líder de los socialistas madrileños por calumnias e injurias. Que llegara el primer escrito por esta causa a los juzgados de Plaza de Castilla sólo era cuestión de tiempo. Y hoy ha sido el día. Su nombre es Elena Mudarra y es la viuda de Matías Morante de la Calle, uno de los altos cargos que Gómez pretende imputar por la Gürtel... pese a que llevaba tres años muerto.

Según ha podido saber ABC, Elena Mudarra tiene previsto acudir esta mañana a los juzgados para presentar una denuncia contra el líder de los socialistas madrileños por calumnias e injurias hechas con publicidad. No pide dinero, ni nada material. Sólo quiere una disculpa pública de Gómez, algo que no ha recibido todavía, pese a que el secretario general de los socialistas madrileños afirmara en su momento que le había pedido perdón al día siguiente.

En la denuncia, Elena Mudarra señala que Gómez acusó a su marido «de manera pública, falsamente o con temerario desprecio a la verdad» de haber cometido los delitos de prevaricación, malversación y de negociaciones prohibidas a funcionario. Mudarra entiende que las manifestaciones que realizó en su día Gómez «han lesionado gravemente la dignidad y el buen nombre» de su marido, y han ocasionado «un gran daño» tanto ella como a sus hijos y familiares. «Todos hemos contemplado con gran desazón que su nombre quedara manchado de manera pública y que mi propio esposo no pudiera defenderse por haber fallecido el 15 de abril de 2007», señala en la denuncia.

La viuda también afirma que las acusaciones del líder de los socialistas madrileños contra su esposo «son falsas y desprecian el hecho de que ha servido durante toda su vida a los ciudadanos desempeñando sus funciones con una constante abnegación personal y profesional en la Administración Pública, haciéndolo de un modo intachable y sin que jamás se haya puesto en cuestión su buen hacer en el trabajo».

Matías Morante de la Calle era subdirector de Régimen Interior y Servicios Generales de la Consejería de Educación cuando le fue detectado un tumor, que le obligó a dejar el cargo en enero de 2007. Falleció tres meses después. Antes, también había ocupado puestos de responsabilidad en la política deportiva. Por este motivo, está previsto que hoy, además, la viuda recoja la Real Orden del Mérito Deportivo, a título póstumo, con el que el Consejo Superior de Deportes ha decidido reconocer la labor de este alto funcionario. La entrega de medallas estará presidida por la Infanta Doña Elena y el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky.