CARTAS AL DIRECTOR
El sincrotrón de Aznar
Tiene gracia que sea Zapatero, que nunca ha apostado por el gasto en Investigación y que lo ha recortado drásticamente en los Presupuestos, el que ahora se ponga las medallas de la construcción del sincrotrón y se haga fotos y entrevistas entre sus cables. La realidad es que si hoy tenemos una instalación de alto nivel científico como ésta en Cataluña hay que agradecérsela a ex ministros que ya no están en primera línea política, como Josep Piqué o Ana Birulés, y también a Aznar.
Tanto criticar al Partido Popular, pero las grandes inversiones en Cataluña, desde el sincrotrón al AVE, pasando por la línea 9 del Metro y las nuevas terminales del puerto y el aeropuerto de Barcelona, se aprobaron con el PP y ahora Zapatero y Montilla solamente recogen los frutos y se hacen las fotos.
Raquel C. Cañellas. Barcelona
R educir ministerios frente a la crisis
Soy un ciudadano desempleado de cuarenta años de edad que recibe una prestación social no contributiva de quinientos euros mensuales por una gran discapacidad, como consecuencia de una enfermedad poco común. Dada la compleja papeleta que tengo como consecuencia de la escasa cuantía de esta prestación, la cual «no da ni para costear el alquiler de una vivienda», hace dos años me dirigí al Ministerio de Igualdad creyendo que atendía desigualdades sociales de todo tipo, para exponer mi situación y recibir orientación para salir de esta precariedad social. Pero dicho Ministerio me respondió amablemente mediante un escrito diciéndome que no podía atender mi cuestión porque dicho Ministerio sólo trata materias relacionadas con igualdad de genero, sugiriéndome que me dirigiera al Ministerio de Sanidad y Política Social. Nuevamente me dispuse a contar mi historia al Ministerio de Sanidad y Política Social, pero desde éste me respondieron que en lo referente a cuestiones de empleo he de dirigirme al Ministerio de Trabajo e Inmigración. De momento no he tenido más ánimo de volver a remitir mi historia a otro Ministerio porque estoy cansado de ir relatando mis problemas de ventanilla en ventanilla por distintos ministerios sin que nadie los atienda.
Desde mi punto de vista es ahora de reducir ministerios para ahorrar gastos frente a la crisis. Tal vez sería óptimo que Política Social se incluya en el Ministerio de Trabajo, dado que al ser materias que tienen una cierta vinculación y que siempre estuvieron unidas -Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales-, evitaría que muchas personas en estas situaciones dejemos de dar vueltas de ventanilla en ventanilla. Asimismo, dado que el Ministerio de Igualdad no atiende todo tipo de desigualdades sociales, sino tan solo «igualdad de genero», debiera de convertirse en un departamento especializado de la Política Social. Todo ello supondría un modo ordenado y eficaz de prestar servicio a los ciudadanos.
Enrique G. Blanco. Madrid
Sólo es mi historia
Yo sólo cuento mi historia, y luego cada uno que haga lo que crea en su vida. Estando soltera me quedé embarazada. El papá pasó de la criatura. Yo no sabía qué hacer, si tenerlo o no. Entre tanto, me hicieron los análisis habituales, y resultó que tenía una lesión CIN2 en el cuello del útero que no se había detectado antes. Me hicieron pruebas y más pruebas. Me dijeron que si era cáncer tenía que abortar para tratarme. Hablé con la clínica y me citaron para practicarme el aborto. Estaba de siete semanas. La noche anterior soñé con él, que me cogía de la mano y cruzábamos una calle camino de un parque. Estaba precioso y tenía una sonrisa tremenda. Al día siguiente, no sé por qué, cogí el teléfono y anulé la cita. Me trataron, pasé muy malos ratos sola. Lloré muchísimo, y aún ahora mi situación económica no es nada clara, pero cada tarde cuando llego y me da uno de sus lametones-besos y me coge de la mano para llevarme al parque pienso que, al darle yo a él la vida, él también me la ha dado a mí.
Gema Lucas L. Madrid
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