Agricultores exprimidos
Las reivindicaciones de los agricultores han tenido por lo común poco éxito porque los consumidores, máxime los urbanos, donde reside el poder político, han pensado siempre que cuanto más se exprima al campo más barato tendrían los alimentos. Las actuales condiciones del mercado, sin embargo, permiten a los intermediarios comprar muy barato al agricultor y vender muy caro al ciudadano, comiendo los intermediarios, por así decirlo, «a dos carrillos». De ahí que en la gran manifestación agraria de Madrid hayamos visto, entre otros, múltiples carteles denunciando esta situación y llamando a la unión de agricultores y consumidores contra los abusos de los intermediarios: «Me quitan mi pan y comes peor. Contra abusos, unidad», se podía leer en algunas de esas pancartas. Concretamente, esta denuncia se refiere no sólo al precio, sino a las condiciones precarias de los alimentos, a los que tanto intermediario alarga el periodo previo a su consumo, lo que termina por perjudicar su calidad.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete