Cameron Diaz encuentra en Japón el secreto de la felicidad

Tras pasar un tiempo con su familia en Japón recuperándose de una mala época, Cameron Díaz vuelve llena de fuerza y con dos estrenos que se alejan del habitual tono humorístico de sus películas. La actriz ha hablado sobre su vida amorosa y profesional en una entrevista para la revista 'Glamour'.

Mientras trataba de superar su ruptura con Justin Timberlake, Cameron Díaz sufrió otro revés: su padre murió repentinamente, a los 58 años, de una neumonía. La actriz sintió que su mundo se venía abajo, por lo que decidió irse un tiempo con su hermana y su madre a Japón, y allí tratar de pensar sobre lo que estaba ocurriendo.

El resultado del retiro ha sido bueno, y ahora Cameron ha vuelto con las pilas cargadas y dos películas a punto de estrenarse. Tanto 'La decisión de Anne' como 'The Box' son dramas, por lo que parece que la actriz está intentando apartarse de su habitual registro humorístico.

Cameron ha explicado que, tras la muerte de su padre, afronta su vida con mayor madurez. "Con el paso del tiempo dejas de verte joven, pero lo que envidiamos realmente de la juventud es su inocencia, porque vivir así es maravilloso. Estoy aprendiendo a ser feliz con la madurez porque dejas a un lado toda la arrogancia humana para enfrentarte a ella con humildad".

En 'La decisión de Anne', la actriz da vida a una madre con tres hijos, pero Cameron asegura que eso no le ha despertado el instinto maternal. "No voy a decir si lo tengo o no, ahora mismo mi vida no camina en esa dirección. Soy tía y no tengo ninguna prisa por ser madre", ha asegurado a la revista 'Glamour'.

HACE MUCHO EJERCICIO Y HUYE DEL BOTOX

Pese a estar en la mitad de la treintena, la actriz de 'Los ángeles de Charlie' reconoce verse mejor que nunca. "Ya no tengo 25 años y no me importa, pero tengo que reconocer que mi cuerpo está en mejor forma ahora que hace diez años, entre otras cosas porque hago mucho ejercicio, cardio y pilates".

Afirma que no se plantea la cirugía estética porque no querría convertir su cara en "algo totalmente antinatural", y no entiende "por qué a la gente le asusta tanto envejecer. Deberíamos abrazar la madurez, es otro tipo de belleza".

En cuanto a su vida amorosa, reconoce que no necesita un hombre a su lado para ser feliz, pero que si lo tuviera estaría encantada. Cameron asegura que le gustan los hombres "conscientes, que saben lo que quieren en la vida y que confían en sí mismos". Y continua: "creo que hombres y mujeres tienen que ser capaces de ser independientes, pero soy realista; todo el mundo desea ser feliz y tener una pareja, `yo también! "