El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, se entrevistó hoy con el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, y con los miembros del Consejo Permanente del organismo panamericano, del que espera su apoyo para su restitución.

El derrocado mandatario llegó antes de tiempo a la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), donde se reunió primero con los países de la Comunidad del Caribe (Caricom), indicó a la prensa el ex embajador de Honduras ante el organismo, Carlos Sosa.

Ese encuentro precedió al que mantuvo después con Insulza en el despacho del titular de la OEA. Zelaya se reunió más tarde con los embajadores de los 33 países miembros activos del Consejo Permanente del organismo interamericano.

El depuesto presidente y una numerosa delegación que le acompaña, esperan de las reuniones en la OEA que el organismo regional "continúe tomando decisiones unánimes para ir impulsando cada vez más el retorno" de Zelaya, dijo Sosa a la prensa.

Sosa, "zelayista", era embajador de Tegucigalpa ante la OEA hasta el pasado 4 de julio, cuando Honduras fue suspendida de su participación en el organismo continental. El diplomático negocia con otros países de la OEA para que presenten una resolución en la que conste que el organismo no reconocerá ningún proceso electoral que se celebre en Honduras bajo la tutela del Gobierno de Roberto Micheletti.

Ese texto aún no ha prosperado, señaló, pero el ex embajador hondureño ante la OEA expresó su esperanza de que se pueda presentar "pronto" ante el Consejo Permanente. La estancia de Zelaya en Washington, la quinta desde que fue derrocado y expulsado de Honduras el pasado 28 de junio, se prolongará hasta el jueves.

Ese día, se reunirá previsiblemente con la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, según dijo el portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly. Zelaya mantendrá, además, encuentros con organizaciones de la sociedad civil y de derechos humanos, y defenderá su postura en destacados centros de análisis políticos.