España tiene un tipo del Impuesto de Sociedades de un 30% frente a una media de la Unión Europea un 23,5% pese a haber bajado en un 5% en nuestro país desde el año 2000, según datos de Eurostat. En los tributos que pagan las personas físicas también España está por encima de la media, con un tipo del 43%, frente al 37,8% de media de la UE.

Frente a estos dos parámetros, España se encuentra sin embargo bastante por debajo de nuestros socios europeos en los impuestos que gravan el consumo, un 15,9% frente a una media europea del 22,2%, y en los del trabajo, un 31,6% frente al 34,4%.

En conjunto, y pese a que pagamos más por IRPF y Sociedades, la presión fiscal en España, el 37,1% del PIB en 2007, está 2,7 puntos por debajo de la europea, el 39,8%.