Moratinos le roba imagen a la ministra de Defensa
Hoy ha llegado la hora del resarcimiento. El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos , ha tomado a primera hora de la mañana el micrófono y ha robado focos a Carme Chacón, titular de Defensa, para dar el «bombazo» informativo del día: se mandará una «cifra pequeña» de tropas a Afganistán. Lo ha hecho en el Palacio de La Moncloa antes de meterse a la reunión del Consejo de Ministros, que hoy sólo tiene previsto la aprobación de asuntos «menores», a sabiendas de que las preguntas sobre este asunto marcarán las preguntas de los periodistas en la rueda de prensa posterior a cada sesión y que, en ese caso, tendrá que solventar la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. Además, el ministro Moratinos ha conseguido con su sorpresivo anuncio del envío de un nuevo contingente de soldados al país asiático para encargarse de la «formación» y el «entrenamiento» de un batallón del Ejército local que, a diferencia de lo que ocurrió con la retirada de tropas de Kosovo, demostrar una estrecha colaboración interministerial. Después de soltar el anuncio, ha decidido trasladar todos los detalles del mismo a la ministra responsable de las Fuerzas Armadas, Chacón, que viajará a primera hora de la tarde con el propio Moratinos y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a Estrasburgo-Khel, para participar en la Cumbre de la Alianza Atlántica. Esta cumbre se presenta la oportunidad propicia para que se confirme, tras los pasos de otros países como Bélgica y Portugal, el aumento de tropas destinadas a la misión en Afganistán. La escenografía de hoy ha sido, cuanto menos, peculiar: Moratinos sale a la palestra sin previo aviso, lanza el dardo y dice que será Chacón quien, de nuevo, ocupe portadas de telediarios para explicar en qué consistirá el anuncio. De este modo, se pretende tapar las acusaciones de «afán de protagonismo» y de «ocupar las portadas de telediarios» que se sucedieron durante los días posteriores al 19 de marzo, cuando la ministra se desplazó a la base española en Istok (Kosovo) y les dijo, primero a los militares, que «volvían a casa». Al regresar ella a Madrid, se encontró con pruebas sonadas -como los telegramas publicados por ABC del embajador de España ante la OTAN, Carlos Miranda, en los que daba cuenta del digusto que había provocado en Estados Unidos y la Alianza la determinación del repliegue de tropas españolas en la provincia balcánica- de que sólo conocían «a priori» esa decisión Chacón, en connivencia con el presidente Zapatero , pero con el asombro de un ministro de Exteriores, que se zafó como pudo de la evidente descoordinación entre ambos departamentos del Gobierno.
Noticias relacionadas
- Especial: Los retos de la OTAN en su 60 aniversario
- Zapatero asiste esta tarde a la cumbre de la OTAN
- España enviará a Afganistán «una cifra pequeña» de soldados para formar al Ejército
- Solana: «La retirada de Kosovo no es una espantada»
- IU sospecha que se acabará doblando el contingente a Afganistán
- Rajoy critica el aumento de tropas «por la puerta de atrás»
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete