El régimen castrista sella con el Kremlin una alianza estratégica y 30 acuerdos
Agotado ideológicamente y con una economía exhausta, el régimen castrista ha encontrado su tabla de salvación en Moscú. Rusia y Cuba sellaron ayer una alianza estratégica y concluyeron una treintena de acuerdos que abarcan prácticamente todo. El Kremlin abre una grieta en el embargo y trata, no sólo de hacer negocios, sino de conquistar una nueva cota geoestratégica.
Los presidentes de Rusia y Cuba, Dmitri Medvédev y Raúl Castro, rubricaron ayer en el Kremlin el memorándum que, según el viceprimer ministro, Igor Sechin, «abarca todas las áreas», energía, comercio, educación, ciencia, deporte, industria agroalimentaria y pesca, un crédito al Estado cubano, cuya cuantía no se dio a conocer, y ayuda humanitaria para las zonas afectadas por los huracanes. Sechin afirmó también que «la cooperación en el terreno militar continuará».
«Hoy se abre una nueva página en la historia de las relaciones entre Rusia y Cuba», manifestó Medvédev tras firmar el memorándum, a lo que Castro respondió: «somos viejos amigos, nos hemos tratado en las buenas y en las malas, que es la mejor forma para que la gente se conozca».
El dirigente cubano permanecerá en Rusia hasta el próximo día 4. El jueves tuvo un encuentro informal en el bosque de Zavídovo, en las afueras de la capital, en donde organizaron una comida al aire libre. La temperatura rondaba los siete grados bajo cero, pero Castro se mostró encantado al recordar que, en ese mismo lugar, participó en una montería en compañía de su hermano Fidel hace más de 40 años.
Concentración en Madrid
La Asociación Española Cuba en Transición (AECT), que preside Matías Jové, ha convocado, junto con la Asociación de Iberoamericanos por la Libertad, una concentración el domingo en la Puerta del Sol «para protestar contra la dictadura castrista, exigir que finalice y mandar a los cubanos un mensaje del pueblo español diciéndoles que estamos junto a ellos», comentó a ABC Matías Jové. El presidente de la AECT señaló que, aunque varios partidos apoyan la convocatoria, ésta no tiene carácter político, y que el «Manifiesto por la Libertad del pueblo cubano», con el que concluirá el acto, será leído por la escritora cubana exiliada Zoe Valdés.
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