Sevilla: Nazaré planta cara al triunfo
Antonio Nazaré vino a la Maestranza a plantarle cara al triunfo, a no irse de vacío. Sabe lo que es pasar en blanco cuando la oportunidad llama a tu puerta. Y en esta ocasión,tuvo que decirse a sí mismo, a buen seguro, que esta vez iría la vencida. Y por fortuna así fue. Cortó una oreja y pudo haberse llevado más trofeos en el esportón. Pero lo importante, por encima de todo, es la dimensión que dejó. Tuvo el mejor lote de la bien presentada novillada de Albarreal. Primero y cuarto encerraron en sus embestidas calidad y nobleza. Quizá algo bajos de fuerza, pero novillos que repetían con franqueza en todo momento.
Ya dejó ver que venía a por todas el nazareno en el saludo de capa a su primero, aunque algunas verónicas resultaron enganchadas. El astado, tras el segundo puyazo, se fue a tablas. Pero Nazaré lo vio claro y lo brindó al respetable. Y desde los ayudados por alto de inicio de faena el de Albarreal comenzó a tomar la muleta con nobleza, viniéndose de largo. Fijo en los cites del novillero, que le enseñó el engaño, siempre muy adelantado, para traerse largo y detrás de la cadera. Seguía repitiendo el animal y Nazaré toreando con firmeza y pulcritud. Estuvo francamente bien Nazaré, que sin embargo marró con los aceros. El trofeo se quedó en una vuelta al ruedo.
Sí la obtuvo del cuarto, otro buen novillo de García-Palacios. Aquí, al menos para un servidor, pecó Nazaré de torearlo demasiado en corto, cuando el astado pedía más distancia. A pesar de ello la faena tuvo empaque en muchos momentos. Midió la faena, algo fundamental, y encima enterró el acero. Cayó ahora la ansiada oreja.
De puntillas pasó en su presentación en la Maestranza el mexicano El Payo. Venía precedido de cierta fama por lo realizado en otros cosos, entre ellos Madrid, pero en esta ocasión no se le vio prácticamente nada. Su primero era un novillo sosote que debió contagiar al chaval. No se comía a nadie el quinto, pero El Payo tampoco estuvo a la altura de las circunstancias.
Rubén Pinar está a las puertas de la alternativa. Tiene oficio y sabe manejar los trastos. Pero no destacó sobremanera en el día de ayer. Sí con la espada. El sexto imposibilitó lucimiento alguno de Pinar.
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