Los secretos de construcción de la única maravilla del mundo antiguo que sigue en pie
La pirámide Keops, en las afueras de El Cairo (Egipto), estaba recubierta de piedra caliza blanca, fue el edificio más alto de la Tierra durante milenios y probablemente se utilizó un túnel interno para subir los bloques de piedras
La primera vez que muchos turistas ven las pirámides de Egipto es desde la piscina de un hotel. Suelen llegar de noche y, al día siguiente, en el desayuno, de repente ahí están, imponentes, casi al alcance de la mano. Antes de viajar, ... muchos tienen la idea de que las pirámides están relativamente lejos de El Cairo , en el desierto. En seguida descubren que no es así. Pero esa idea debe influir en la sorpresa de la primera vez, con el desayuno sobre la mesa. La gran pirámide de Guiza, también conocida como de Keops , construida 2.500 años a. C., es la única de las siete maravillas del mundo antiguo que permanece en pie.
Noticias relacionadas
Hace unos días, Adolfo Alonso Durá , arquitecto y profesor titular de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Valencia, protagonizó una ponencia en el Ateneo Mercantil de Valencia sobre esta pirámide y las circunstancias en las que se construyó. A este profesor de cálculo de estructuras no le interesa su valor simbólico o la mitología de los faraones sino el hecho de cómo se construyeron , algo sobre lo que aún no hay consenso; cómo se subieron las enormes rocas hasta concluir una pirámide que durante milenios fue el edificio más alto de la Tierra (147,6 metros originalmente, 138,8 actualmente), hasta la Torre Eiffel en el siglo XIX.
Las pirámides eran blancas
Lo primero que recordó Alonso Durá fue que las pirámides eran blancas, recubiertas de una piedra caliza que casi ha desaparecido en su totalidad. «La vista debió ser impresionante -afirma-. Esa cubierta actuaba como una especie de brillante, y seguro que reflejaba el sol a kilómetros de distancia. En la cúspide de la pirámide de Kefrén aún queda parte de ese recubrimiento».
El triángulo sagrado egipcio
Las pirámides apuntan con precisión a los cuatro puntos cardinales. ¿Cómo pudieron hacerlo si no tenían brújula? Alonso Durá explica que «utilizaban un método para identificar con exactitud el norte aún más eficaz que una brújula, que no marca el norte geográfico, sino el magnético. Los sacerdotes y los sabios de la antigüedad observaban el cielo y transmitieron su experiencia durante generaciones. Ellos inventaron las constelaciones. El estudio meticuloso de las estrellas, de cuándo salían y se ocultaban, y de una estrella que nunca se movía, la estrella Polar, hizo posible que pudieran identificar el norte y los demás puntos con absoluta precisión». Con otro método artesanal (el triángulo sagrado egipcio) conseguían un ángulo recto . Así pudieron trazar un cuadrado perfecto en el suelo.
El tiempo y las canteras
La pirámide Keops parece que se construyó en veinte años. No es demasiado tiempo si se tiene en cuenta que hubo que colocar con precisión millones de bloques. Muchos se han preguntado cómo pudieron hacerlo. «La cantera de la piedra de Keops estaba allí mismo -dice Adolfo Alonso Durá-. No están construidas sobre arena, sino sobre roca. Una parte de la pirámide se excavó sobre esa roca. Esa es la piedra con la que están construidos la mayoría de los bloques, salvo el granito de la cámara real, que son pocas piezas, y el recubrimiento blanco, una caliza especial procedente de una cantera que está a diez o doce kilómetros».
Antecedentes de las pirámides
El antecedente de las grandes pirámides son las mastabas . Los egipcios enterraban en el suelo, y formaban un pequeño túmulo de adobes que con el tiempo fueron de mayor tamaño. Su altura y prestancia marcaba el poder del difunto y de su familia. Así se hizo durante siglos, hasta que se construyó la primera pirámide de piedra, la de Zoser , que tiene alrededor de 4.700 años (2650 a. C.) y que ahora está en reconstrucción tras sufrir un terremoto. Eran tumbas sencillas que fueron creciendo según las dinastías, y el féretro estaba bajo tierra. Al faraón Senferu, padre de Keops, se le atribuyen tres de esas pirámides. Fue precisamente el hijo quien ordenó construir la pirámide que hoy lleva su nombre.
La gran pirámide tiene una base de 230 metros por 230 metros, unos 52.000 metros cuadrados; un peso aproximado de 6,5 millones de toneladas, y se utilizaron 2,3 millones de bloques de piedra caliza , aparte de los pocos bloques de granito de la cámara real y los de caliza blanca del recubrimiento. La pirámide es maciza, con un suelo rocoso, una entrada, una galería que -en el primer nivel- lleva a la tumba de la reina y más arriba a la cámara real, hecha con granito y con una superestructura para evitar que fuera aplastada por el peso.
La estructura
El misterio no está en la estructura (lo que resiste), sino en cómo se construyó, opina Alonso Durá. La resistencia de la piedra caliza es de 250 kg por centímetro cuadrado, de forma que se necesitaría una columna de un kilómetro de altura para que por su propio peso aplastara la piedra de abajo. La pirámide mide 146 metros de altura. Por lo tanto, la presión a la que está sometida por su propio peso es «ridícula» (11 kg por centímetro cuadrado) respecto a lo que puede resistir (250). El problema no es estructural -insiste-, porque además la pirámide es maciza.
La construcción
En esa época no existía la rueda. Las piedras se trasladaban con una especie de patín de madera de cedro de Líbano , muy resistente, que se arrastraba con cuerdas, suavizando el rozamiento con agua o aceite. Heródoto de Halicarnaso , que vivió entre el 484 y el 425 a. C., dos mil años después de construir las pirámides, cuenta que un sacerdote de Egipto le dijo que la pirámide se construyó levantando los bloques (de dos o tres toneladas) de escalón a escalón, con palancas. Pero Alonso Durá cree que esa versión no tiene por qué ser correcta, porque las pirámides se dejaron de construir pronto, y 2.000 años después, los hechos contados de generación en generación pudieron dar muchas vueltas.
La mayoría de los estudiosos del mundo egipcio piensa que los bloques se subieron con rampas , cargándolos en patines de madera, de peldaño en peldaño. A partir de ahí hay quien opina que las rampas se hicieron en el exterior de la pirámide. Hay muchas teorías, algunas descabelladas, opina Alonso Durá. «De todos los sistemas que he visto, el que más me convence es el que propone un arquitecto francés, Jean-Pierre Houdin , que dejó el despacho para investigar este asunto durante diez años. En su opinión, los egipcios lograron levantar la colosal tumba de Keops a través de u na rampa en espiral construida en el interior del edificio» .
«Houdin piensa en una rampa interior en la pirámide, una rampa recta que va subiendo con una pendiente del 7% hasta el final. Mientras subes niveles, iban dejando los huecos en cada nivel y tapándolos, sin que hiciera falta añadir material que luego habría que bajar. El pasadizo tendría una longitud de hasta un kilómetro desde la base hasta el final. ¿Cuántos bloques se subían cada día? No hacía falta que estuvieran bien pulidos (la pulcritud solo se pedía para el exterior). Habría personas que extraían bloques, otros que los trasladaban, otros que los subían y otros que los organizaban arriba».
«¿Esta teoría es real? ¿Existen esas galerías? Houdin investigó un templo de un siglo posterior a Keops que se destruyó en el siglo XIX, y efectivamente ahí se utilizó esa técnica. Por tanto, no es descabellado que se hiciera en los tiempos de Keops. Y en 1986, con una técnica de georadar, se hizo una especie de “radiografía” que detecta el cambio de densidad. Ellos no encontraron otras cámaras sepulcrales, pero sí cambios de densidad que podrían corresponderse con las galerías. El siguiente paso sería intentar llegar a esas galerías, pero habría que perforar mucho». Por último, ¿cómo se subieron los bloques grandes de granito , que no son de dos toneladas, sino de sesenta, y mucho más grandes, de seis o siete metros de largo? Según Jean-Pierre Houdin, los subieron por la gran galería que desemboca en el nivel de la cámara real. «No sabemos cómo se construyeron las pirámides. Hay teorías. La que he explicado es coherente. Es importante encontrar las galerías perimetrales para confirmarlo».
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete