MODA
Por qué el estilo de John F. Kennedy Jr. siempre es una buena opción para inspirarte
Su vida rodeada de lujos, sumada a las circunstancias que lo rodeaban, su personalidad curiosa y las personas que frecuentaba se reflejaban en su vestimenta, una de las más imitadas de los últimos años
Definir la moda no es tarea fácil, pero hay algo que todo fashionista sabe a la perfección. Por un lado, que se trata de un fenómeno cambiante e inclusivo capaz de hacer que una persona sucumba hasta a la tendencia que había jurado que no llevaría; y por otro, su ciclicidad, o lo que es lo mismo, lo que en un rango de tiempo estuvo en boga es muy probable que vuelva con fuerza tarde o temprano.
Si por algo se caracterizan las últimas temporadas es por haber traído de nuevo las corrientes más punteras de los ochenta y noventa, de ahí que todo lo relacionado con aquellas décadas tan dispares sea la mayoría de las veces un acierto. Y no, no nos referimos solamente a las propuestas que se veían en pasarela no , hablamos del street style y su reinterpretación.
A la hora de buscar inspiración hay un personaje que es todo un icono por las circunstancias que le rodeaban, así como su inconfundible sello personal, nos referimos a John F. Kennedy Jr –o como todos lo llamaban cariñosamente, John John - cuya fotografía a los 3 años despidiendo a su padre quedó grabada en las retinas de medio mundo, que de forma inconsciente empezó a fijarse en él y el camino que tomaría.
John tenía las ideas muy claras y no quería dedicarse al mundo de la política , como su madre bien deseaba, por eso, además de en derecho se matriculó en historia. Posteriormente ejerció como abogado antes de fundar en 1995 su revista de actualidad, George, que siguió vigente hasta 2001, dos años después de su muerte en aquel fatídico accidente de avioneta que le costó la vida junto con su mujer Carol Basset y la hermana de esta, Lauren. Pues bien, volviendo al tema de su estilo, hay que decir que no tenía miedo de hacer suyas todo tipo de tendencias , por opuestas que parecieran a priori.
Su vida rodeada de lujos , sumada a su personalidad curiosa y las personas que frecuentaba –desde la actriz Daryl Hannah con quien estuvo a punto de casarse, a Cindy Crawford, Sarah Jessicah Parker , e incluso muchos lo relacionaron con Lady Di o Madonna - se reflejaba en su vestimenta. Si echamos un vistazo tanto a sus looks de calle como a sus apuestas más sofisticadas no es difícil darse cuenta de que era un adelantado a su tiempo cuyo vestidor podría seguir estando vigente en la actualidad y, te contamos por qué debería ser tu inspiración.
Dominaba el athleisure
Eso de llevar zapatillas con pantalones de traje , o sudaderas con camisas y demás combinaciones que aúnen prendas de sport con otras más formales, parece una novedad popularizada por diseñadores como Virgil Abloh o Nicolas Ghesquière . Pero dos décadas antes el joven John John ya era un inseparable de las sneakers de todo tipo, los polos de Lacoste –que tenía en una amplia gama de colores-, pantalones de chándal con jerséis de punto o las gorras con trajes.
Cuando se ponía un traje sabía cómo brillar
Y hablando de los dos piezas, era capaz de lucir en un mismo día desde las prendas más bohemias a los trajes más recios sin perder su sello personal. De hecho, los tabloides norteamericanos lo describían como ‘el nuevo galán del siglo XX’ e incluso llegó a ganar el premio al ‘Hombre más sexy’ otorgado por la revista People.
Se atrevía con todo tipo de pantalones
Los chinos y vaqueros no eran sus únicas opciones para el día a día, pues era habitual verlo con diseños con pinzas, modelos baggy de algodón o los multibolsillos. Eso sí, cuando se decantaba por unos jeans no faltaban los Levi’s en colores claros con cortes rectos, sus favoritos.
...y accesorios
Quizás ese fue uno de los puntos determinantes a la hora de dotar de ese punto canalla a sus estilismos: corbatas con estampados divertidos; cinturones con cadenas, velcros y demás ornamentos; gorras sporty e incluso cintas para el pelo; además de su gran colección de gafas de sol donde encontrábamos desde las clásicas Ray-Ban de aviador a los modelos que se prolongaban hacia los laterales y que tan en boga estuvieron.
Las tendencias más inverosímiles eran su punto fuerte
Y no hablamos solo de los jerséis de ochos o las camisas hippies con mangas abombadas, también los chalecos que adoraba conjuntar con chinos y vaqueros.
Estos son solo algunos de los indicadores de que prestaba atención al más mínimo detalle sin que el resto lo notase para lograr ese estilo efortless, que en realidad era fruto de su buen ojo para vislumbrar las tendencias clave y que todavía hoy lo hacen figurar entre las listas de los mejor vestidos.
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