Diez trucos para ser el más elegante
Las claves de estilo de un auténtico gentleman

El debate entre si el estilo se tiene o se adquiere debería saldarse siempre con la primera de las alternativas, pero si hablamos de vestir bien podríamos decir que es una habilidad que puede adquirirse con la práctica . Uno puede aprender perfectamente a elegir la ropa que mejor le sienta y tener claro el momento en el que lucirla, solo es cuestión de buscar inspiración, seguir los consejos adecuados… y tener claro lo que uno quiere transmitir con ella.
Estos son algunos de los tips que puedes seguir para empezar a conseguir tu objetivo.
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Lleva siempre la talla correcta
Una auténtica obviedad que por desgracia muchas veces no se tiene en cuenta. Ni la silueta ‘ oversize ’ significa comprarte una prenda de dos tallas más ni la ‘slim ’ llevar dos menos de las que te corresponden.
Para que un look quede perfecto, cada una de las piezas que lo componen deben adaptarse al cuerpo como merece quedando perfectamente encajado de hombros, torso así como de largo de mangas y pantalones, el patronaje está para algo y si te lo saltas, la estrecha línea que separa lo ‘cool’ del ridículo más absoluto puede llegar a difuminarse
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Los básicos nunca fallan
Un buen fondo de armario es la solución a todos tus problemas de estilo. Elaborarlo no es fácil y requiere tiempo y dedicación, pero compensa con creces ya que son esas prendas capaces de sacarte de cualquier apuro sin importar la edad, la ocasión, el momento del año o la personalidad de cada uno.
Un traje azul marino, una camisa blanca, una gabardina, un pantalón vaquero, una camiseta de manga corta lisa y una chaqueta vaquera son solo algunos ejemplos de básicos de los que uno nunca tiene suficiente.
Cuando dudes y no sepas qué ponerte, tira de ellos.
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Viste acorde a tu edad
Llega un momento en la vida en el que uno debe asumir que hay prendas que no le están haciendo ningún favor y determinadas tendencias que no puede seguir por mucho que quiera. O, al menos, no de la forma en la que se proponen sino que se trata de probar a darles una vuelta de tuerca para adaptarlas a tu armario.
Lo mismo ocurre a la inversa, no trates de añadir más edad a tu carnet de identidad cuando no lo necesitas, te estarás tirando piedras contra tu propio tejado.
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Vigila el largo del pantalón
En los últimos años la moda ha querido que se enseñen los tobillo s independientemente de la estación del año en la que nos encontremos, pero esto no quiere decir que tenga que ser siempre así y de la misma manera.
Depende básicamente del corte del pantalón ya que no exige lo mismo un pitillo que uno recto.
En el caso de los modelos de pinzas propios de los trajes busca un punto en el que el bajo roce el zapato en la parte delantera y caiga ligeramente hasta la zona del tacón.
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Recupera el traje como recurso
El hecho de que los códigos de vestimenta se hayan relajado en el trabajo, la estética deportiva se haya conseguido asentar en la calle como algo habitual y que la tendencia en la moda vira hacia una mayor comodidad han provocado que el traje quede relegado a una posición casi simbólica del armario que ha pasado a utilizarse solo en momentos muy escogidos como las bodas. Pero, ¿por qué no recuperarlo como recurso para el día a día?
Camisa y corbata no tienen por qué ser siempre sus compañeros, atrévete a lograr un equilibrio entre lo elegante y lo casual combinándolo con suéter, camiseta, polo o camisas más informales e incluso atrévete a añadirle unas zapatillas si la ocasión y el contexto lo permite.
En esta pequeña guía encontrarás el modelo perfecto en función de la ocasión.
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Zapatillas sí, pero con moderación
Hasta los maestros artesanos zapateros de siempre se han animado a fabricar zapatillas que funcionan de manera fiable tanto con ropa casual como con sastrería.
La clave está en no abusar de ellas aunque resulte tentador por su comodidad (con la cantidad de estilos de zapatos que existen en el mercado, ¿vas a limitarte a llevar siempre sneakers?) y elegir bien el momento en el que lucirlas .
Nuestra recomendación más versátil, las clásicas blancas . Combinan con todo y nunca fallan.
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Escoge bien los tejidos
Siempre que tu presupuesto lo permita, opta por la mejor calidad a la hora de escoger cualquier prenda o complemento. Leer bien las etiquetas es fundamental, no solo por el cuidado que tienes que darles sino porque su composición será determinante a la hora de dar una mejor o peor apariencia.
Prioriza el algodón frente al elastano, el polyester o la polipiel y en el caso de las lanas opta por el cashmere para una mayor calidez y exclusividad.
En este diccionario de los tejidos encontrarás algunos de los más exclusivos del momento y los más valorados en el mercado que son acierto asegurado.
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El poder de los accesorios
Tienen una capacidad tremenda para mejorar un estilismo por sencillo que parezca por los que su uso es absolutamente indispensable.
La circunstancia y las prendas elegidas marcan si debes optar por corbata, pañuelo , pajarita, sombrer o, tirantes o cinturón; así como por el tipo de bolso o el calzado.
Respecto a este último, es muy importante no olvidar que sea cual sea el par zapato que elijas, por supuesto, debe lucir siempre limpio .
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Que el 'grooming' te acompañe
Un look no se limita exclusivamente a la ropa y los complementos, necesita que el resto del conjunto esté a la altura.
De nada sirve ir impecablemente vestido si se lleva la barba descuidada , las cejas excesivamente rebeldes o el pelo sucio.
No te olvides de cuidar todos esos pequeños detalles que pueden echar por tierra o elevar hasta límites insospechados tu estilismo.
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No tengas miedo a jugar
Si siempre te limitas a las mismas combinaciones te estarán perdiendo seguro interesantes fórmulas.
Abre tu armario (y tu mente) y atrévete a mezclar estampados, tendencias, siluetas y colores hasta dar con un look que plasme tu verdadera personalidad y estilo.
Saltarse las reglas suele ser mucho más divertido.
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