Temor de los vecinos a que haya otro derrumbe en la Playa de Palma
El alcalde de la capital balear, contundente: «Si hay denuncias, se actuará»
La terraza del 'beach club' de Palma donde fallecieron cuatro personas era ilegal y no tenía licencia
El derrumbe mortal del Medusa Beach el pasado jueves ha sacado a la luz pública las vergüenzas de otros edificios en primera línea de la Playa de Palma, algunos con grietas o apuntalados y en evidente mal estado. Los vecinos de la zona llevan tiempo denunciando que hay establecimientos que inicialmente eran viviendas de veraneo, construidas con materiales modestos de la época hace cuatro décadas – o más- y que han sido reconvertidos en locales de ocio.
A escasos metros del Medusa Beach se ubica un restaurante de tres plantas con una enorme grieta que «pone los pelos de punta», muestran los vecinos. «Ya habíamos advertido de que cualquier día pasaría algo, y ha pasado», apuntan desde la Asociación de Vecinos de la Playa de Palma, insistiendo en la necesidad de realizar mayores controles a estos locales reconvertidos.
El temor vecinal se ha acrecentado en los últimos días ante la posibilidad de que se repita un derrumbe como el del Medusa Beach que se cobró la vida de cuatro personas y dejó 16 heridos. «Podrían haber sido muchas más víctimas si la discoteca del sótano hubiera estado abierta», advierten sobre el local subterráneo, que en el trágico momento estaba cerrado, sobre el que cayeron la terraza y la planta baja del Medusa por un sobrepeso en la azotea. Los informes de los técnicos y bomberos han concluido que la terraza era ilegal y no tenía licencia para su uso.
Sobre la alarma vecinal, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, ha sido contundente este martes y ha asegurado que «si hay denuncias, se actuará».
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