La hormiga loca vuelve a invadir Barcelona: localizan varios focos en Montjuic y plaza Cataluña
Se detectó por primera vez en febrero de 2020 en el Puerto de Barcelona. Puede desarrollarse hasta convertirse en una plaga agrícola que afecte a edificios e infraestructuras
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La hormiga loca vuelve a invadir Cataluña y concretamente Barcelona. Esta especie invasora muy destructiva se ha detectado en Montjuic, en el cementerio y en los jardines de Mossèn Costa i Lloberay y en plaza Cataluña tras haber sido erradicada hace tres años. En una revisión rutinaria se ha localizado tres focos en distintos puntos de la capital catalana. Los expertos señalan que no supone un peligro para la salud pública, solo podría tener un impacto económico.
Esta hormiga exótica, paratrechina longicornis por su nombre científico, se detectó por primera vez en Cataluña en febrero de 2020 en el Puerto de Barcelona, posteriormente se encontraron más hormigas locas en una rotonda, varias colonias bajo las tapas del alcantarillado y el suministro. Como la distribución de esta especie estaba acotada a una zona solo se desinfectó con tratamiento insecticida gracias a la rápida actuación de la Generalitat junto a la empresa Bionet. Y fue a finales del año pasado cuando se comenzó a detectar otra vez.
Roger Vila, responsable técnico de la empresa de control de plagas Bionet, explica a ABC que volvieron a encontrar la presencia de la hormiga loca en varios puntos de Barcelona en una tarea de muestreo para monitorizar esta especie, más tarde confirmaron esta noticia también con otros compañeros de profesión que la habían detectado en plaza de Cataluña.
La vía de entrada de la hormiga loca en Barcelona
Una de las primeras hipótesis que se barajaron cuando se detectó es que entró por un cargamento del algún transporte marítimo. En el informe de actuación ya se explicó que no se podía erradicar de forma definitiva y era de esperar que volviera, los expertos indicaron que era necesario realizar un seguimiento pasados los meses de frío y que en futuras actuaciones habría que ampliar el alcance de la actuación a un espacio mayor ampliando el perímetro para colocar cebos con insecticidas de efectos retrasados para terminar de eliminar posibles nidos o restos de individuos que hayan podido quedar fuera.
La hormiga loca, que apareció en la Península hace 20 años, tiene una elevada capacidad destructiva, los principales impactos que provoca es que desplaza a otras especies nativas y otros invertebrados, sin embargo Roger Vila explica que estas hormigas cosmopólitas (porque no se conoce originalmente de dónde proceden) localizadas en Barcelona están conviviendo con otras cuatro o cinco especies, al contrario que su comportamiento habitual. Puede desarrollarse hasta convertirse en una plaga agrícola que afecte a edificios e infraestructuras.
Es una especie omnívora que forma colonias pequeñas con unos pocos cientos de obreras y una decena de reinas. Este tipo de hormigas son muy adaptables y presentan un nivel de dispersión muy elevado, si no se encuentra a gusto en un sitio, puede buscar otros nuevos e incrementar el nivel de dispersión. En cuanto a si es posible que se extienda a más ciudades, Roger Vila argumenta que las formas de traslado son diversas, por un lado la reina fundadora tiene que superar varias adversidades como el transporte, las condiciones ambientales para generar una colonia, y por otro, a través de una planta que tenga una colonia con algunas hormigas obreras.
Jordi Ruiz, responsable del departamento de Acción Climática de la Generalitat, cuenta a ABC que ahora tratan de investigar no solo el centro de Barcelona, también Hospitalet de Llobregat y eventualmente cualquier lugar cercano donde pueda haber presencia de esta hormiga. Tanto la Generalitat como el Ayuntamiento de Barcelona y el del Hospitalet de Llobregat trabajarán juntos para erradicar este tipo de especies invasoras.
Si no se consigue erradicar como ya se hizo en 2021, la otra opción que tienen los organismos es la de mantenerlas en baja densidad: «A veces nos pasa que nos aparece una especie cuando ya la hemos erradicado en otro lugar que en principio ni pensábamos que estaría. En el caso de las hormigas locas parece que han llegado de otro sitio porque entre una colonia y otra hay casi 1,6 kilómetros de distancia, hablamos de colonias separadas con núcleos primarios», detalla Jordi Ruiz. Como esta especie está presente también en otras partes como Andalucía, Baleares, Murcia o Comunidad Valenciana, desde la Generalitat se pondrá en contacto con los departamentos de estas comunidades autónomas para conocer sus planes de erradicación puesto que tienen más experiencia con estos artrópodos.
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