La estudiante iraní detenida por haber protestado en ropa interior frente a la universidad por el velo se encuentra en paradero desconocido

La protesta de la mujer viene incentivada por el acoso de los miembros del Basich, un grupo paramilitar de voluntarios, que le habrían arrancado el pañuelo de la cabeza y rasgado la ropa que llevaba puesta. La estudiante como protesta se quitó la ropa y se sentó a las puertas de la universidad ante el asombro de los transeúntes.

Según el código de vestimenta obligatorio en Irán, las mujeres deben llevar un pañuelo en la cabeza y ropa holgada en público. Las imágenes, que fueron publicadas por primera vez por el canal de medios sociales de estudiantes iraníes Amir Kabir Newsletter fueron publicadas por numerosos medios de comunicación en lengua persa entre ellos el grupo de derechos Hengaw y el sitio web de noticias Iran Wire, así como por Amnistía Internacional.

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Mikel Ayestaran | Corresponsal en Estambul

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Las imágenes parecen haber sido grabadas por curiosos en un edificio vecino. Otro vídeo mostraba cómo hombres vestidos de civil la metían en un coche y la llevaban a un lugar desconocido. Según el boletín de Amir Kabir, la estudiante fue golpeada durante la detención. «Las autoridades iraníes deben poner en libertad de inmediato y sin condiciones a la estudiante universitaria que fue detenida violentamente tras quitarse la ropa en protesta por la aplicación abusiva del velo obligatorio por parte de los agentes de seguridad», ha manifestado Amnistía Internacional.

El grupo de derechos con sede en Londres, que en los últimos años ha denunciado abusos contra mujeres en cárceles iraníes, añadió: «Hasta que sea puesta en libertad, las autoridades deben protegerla de la tortura y otros malos tratos y garantizarle el acceso a su familia y a un abogado». Añadió que «las denuncias de palizas y violencia sexual contra ella durante su detención requieren investigaciones independientes e imparciales».

La agencia de noticias iraní Fars, de tendencia conservadora, confirmó el incidente en un reportaje en el que publicaba una foto con el estudiante muy difuminado. Según la agencia, la estudiante había llevado «ropa inapropiada» en clase y se había «desnudado» después de que los guardias de seguridad le advirtieran de que debía cumplir el código de vestimenta.

El director de relaciones públicas de la Universidad Azad, Amir Mahjob, declaró posteriormente en un post en X que la estudiante, separada de su marido y madre de dos hijos, «padecía un trastorno mental». Además, el periódico local 'Farhikhtegan' informó de que había sido ingresada en un centro de salud mental.

Citando a «testigos», afirmaba que los guardias de seguridad hablaron «tranquilamente» con la estudiante y negaba las informaciones según las cuales su actuación había sido agresiva. En 2022 estallaron protestas en todo el país tras la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una mujer kurda iraní que había sido detenida por una supuesta infracción del código de vestimenta.

Por su parte, Mai Sato, relatora de los Derechos Humanos de la ONU para Irán ha escrito en su perfil de X que sigue de cerca la situación de la joven, incluída la respuesta de las autoridades.

«No debemos dejarnos solos unos a otros», escribió Katayoun Riahi, actriz que apoyó las protestas, en un post de Instagram en el que expresaba su apoyo a la estudiante. Hossein Ronaghi, destacado activista iraní que fue encarcelado durante las protestas, elogió en un post en X la «valentía» de la estudiante y describió su acción como un «grito desde el fondo del corazón contra la opresión que ha acabado con la vida de las personas, especialmente de las mujeres.»