No los ves. Son como sombras que se dedican a olfatear la felicidad; a construir desde la nada historias ajenas porque de esa manera amasan las propias. Repartidos por toda la geografía española, nacieron con el cambio del milenio a la sombra de la gran crisis de 2008, que a la industria del libro fue llegando en furiosas oleadas. Así lo resume Daniel Fernández, presidente del Real Patronato de la Biblioteca Nacional de España y editor de Edhasa y Clásicos Castalia: “El 2010 fue probablemente nuestro último buen año: la crisis significó la desaparición de casi un tercio de la facturación en dinero que se hacía en este país pasando de tres mil millones de euros a dos mil cien millones. Hubo un batacazo importante y fenomenal, que por otro lado venía a significar algo positivo: que el libro se había convertido en un objeto de consumo más. En medio de la crisis financiera se produjeron varios fenómenos: la irrupción de la profecía de que el libro en papel se acababa; la piratería de títulos en los soportes electrónicos de lectura y también el cambio de consumo de ocio: videojuegos, plataformas, series, TV a la carta, trastocando el panorama. Todo eso se está resituando, y desde luego el libro en papel ha sido el gran vencedor del nuevo milenio, porque está más vivo que nunca”.

LAS LIBRERÍAS CONTINÚAN SIENDO
EL LUGAR DE VENTA
Los canales de comercialización muestran cómo el mercado digital todavía es muy escaso
Librerías
Cadenas de librerías
Hipermercados
Internet
Otros
35%
36%
18,6%
2%
8,4%
907
480
51,54
217
Facturación:
millones
de euros
millones
de euros
millones
de euros
millones
de euros
Cómo consumimos literatura: papel vs digital
50%
40%
60%
30%
70%
20%
80%
10%
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Leen en
formato
digital
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100%
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Facturación según
soporte en 2021
94,8%
Edición impresa
5,2%
Edición digital
La facturación de la edición digital ha aumentado un 6,8% respecto a 2020
LOS ESPAÑOLES LEEMOS 9,9 LIBROS AL AÑO
Nos superan Canadá y Francia (17), EEUU (12) y Corea del Sur (11)
El 67,9%
64,4%
35,46%
De estos, la mayoría lee libros por ocio en su tiempo libre
No lee en su tiempo libre
de la población española lee libros
Porcentaje de títulos editados y facturación 2021
Libros registrados
en 2021
Digitales
24.176
Impresos
55.197
Cómics,
tebeos,
novelas
gráficas
3,1%
66,9 mill.€
770,9
millones de euros
736,7 mill. €
548,9 mill. €
España
79.373
432,2 mill. €
Científico y técnico
Texto no universitario
Italia
100.266
Otros
1,6%
21
mill. €
40,1%
Novela, cuento, poesía
17,9%
Infantil
y juvenil
21%
16,2%
Francia
107.103
Nº de novelas editadas en papel por géneros 2021
Romántica
1.526
Policíaca / espionaje
973
Ciencia ficción / terror
435
Humor
157
Erótica
48
Rusia
115.171
Reino Unido
+ 200.000
Contemporánea
4.536
Clásica
1.625
FUENTE: INE, XMagazin
INFOGRAFÍA: PEDRO JIMÉNEZ, MODESTO CARRASCO Y MUFFINMAKER STUDIO

LAS LIBRERÍAS
CONTINÚAN SIENDO
EL LUGAR DE VENTA
Los canales de comercialización muestran cómo el mercado digital todavía es muy escaso
Facturación
En millones de euros
35%
907
Librerías
Cadenas
de librerías
18,6%
480
8,4%
217
Hipermercados
51,54
Internet
2%
36%
Otros
Cómo
consumimos literatura:
papel vs digital
93,7%
de los españoles leen en formato impreso
70%
80%
90%
100%
6,3%
Facturación según
soporte en 2021
94,8%
Edición impresa
5,2%
Edición digital
La facturación de la edición digital ha aumentado un 6,8% respecto a 2020
LOS ESPAÑOLES LEEMOS
9,9 LIBROS AL AÑO
Nos superan Canadá y Francia (17), EEUU (12) y Corea del Sur (11)
El 67,9%
de la población española lee libros
64,4%
De estos, la mayoría lee libros por ocio en su tiempo libre
35,46%
No lee en su tiempo libre
Porcentaje de títulos editados y facturación 2021
770,9
millones de euros
548,9 mill. €
Científico y técnico
Novela, cuento, poesía
40,1%
21%
Cómics, tebeos,
novelas gráficas
3,1%
66,9 mill.€
736,7 mill. €
432,2 mill. €
Texto no universitario
Otros
1,6%
21
mill. €
17,9%
Infantil
y juvenil
16,2%
Número de novelas editadas en papel por géneros 2021
Contemporánea
4.536
Policíaca / espionaje
973
Romántica
1.526
Clásica
1.625
Ciencia ficción / terror
435
Humor
157
Erótica
48
Libros registrados
en 2021
Digitales
24.176
Impresos
55.197
España
79.373
Italia
100.266
Francia
107.103
Rusia
115.171
Reino Unido
+ 200.000
FUENTE
INE, XMagazin
INFOGRAFÍA
PEDRO JIMÉNEZ, MODESTO CARRASCO
Y MUFFINMAKER STUDIO
Recordando aquello de Gombrich de que “en todas las épocas suelen presentarse a la vez una tendencia y la absolutamente contraria”, comprobamos que en este caso efectivamente ocurre. La crisis del sector originó un paisaje singular para “los enormes monstruos editoriales en esta feria de monstruos”, fermentando al mismo tiempo la masa madre de la creatividad independiente. Así, mientras que los grandes grupos se hacían inmensos, el paisaje se renovaba en sus bases con la aparición de pequeñas firmas con apuestas de lectura cada vez más especializadas, poblando los huecos con talentos olvidados o por descubrir en ediciones muy cuidadas, personales y atractivas.
Un mundo imperfecto
Se trata de casos singulares, pues en realidad estos rastreadores de talentos son más o menos solitarios; panaderos de la tahona de los sueños luchando contra el temor de que se desmorone el bizcocho por exceso de realidad. Viven más que literalmente ‘á bout de souffle’: sin apenas apoyos institucionales, con escasos recursos y la mayoría de las veces invirtiendo los propios; aunque con formaciones académicas de alto nivel y muchas lecturas a cuestas. Así nos lo cuenta Ediciones Menguantes, una editorial leonesa que “surge de una historia de amor entre un diseñador de libros con aspiraciones literarias y una filóloga con inclinaciones editoriales heterodoxas”. Nos dicen que a pesar de las críticas al subvencionismo, lo cierto es que sin un apoyo económico externo es muy difícil mantenerse en el mercado. “Nosotros —admiten— vivimos de otros trabajos alimenticios, no de la editorial”. Similar es la situación de Cascaborra, especializada en adaptaciones de diferentes episodios de la historia de España en formato cómic. Julián Olivares Dengra, su editor, nos cuenta que los primeros títulos que se publicaron salieron al mercado gracias a pequeñas campañas de mecenazgo: “De ahí pasamos a un sistema de suscripción tradicional, aunque la mayor capacidad de financiar la actividad nos la da una pequeña póliza de crédito contratada con el banco; una opción normal y corriente, pero que no imaginas el miedo que te da”. Barbara, de La Navaja Suiza, reconoce: “Nos financiamos con nuestro propio dinero. No hemos recibido ninguna ayuda, ni estatal ni autonómica. Solo ayudas a la traducción de Irlanda y la República Checa, que, como muchos otros países, tienen programas de promoción y traducción de su literatura”. A pesar de esto, la ilusión se antepone siempre y todos concluyen con una seguridad y un optimismo que es conmovedor y ejemplar, envolviendo sus sueños en frases para no olvidar: “Hay que hacer las cosas con alegría y buen oficio y no esperar mucho más” (Athenaica); “Para nosotros, editar es un bello acto de resistencia” (Ediciones Menguantes); “Es inevitable ver con gran ilusión todo lo que ha de venir” (Cascaborra).
Se trata de casos singulares. estos rastreadores de talentos actúan casi siempre en solitario.
Convivir con Fahrenheit
Las dificultades son siempre las mismas y los editores independientes con los que hemos hablado (unos pocos entre muchos que pelean por su espacio y supervivencia) así lo reconocen. José y Lía de Ediciones Menguantes, lo resumen admitiendo el reparto desigual de la tarta del mundo del libro: el 70 % de lo que factura la edición literaria en España pertenece a dos multinacionales y su ritmo frenético de publicación provoca una saturación de novedades, lo que significa que la vida de un libro en la mesa de una librería se acorta muchísimo. “Este es un negocio romántico, pero también de probabilidades, y la saturación de novedades beneficia solo a los grandes, pues con un par de títulos que salgan bien ya lo rentabilizan. Las pequeñas editoriales, con un ritmo de publicación más lento, apenas podemos competir”. Pero al final se impone el entusiasmo: “La democratización de las tecnologías ha generado un panorama muy interesante. A nuestro favor tenemos la posibilidad de ofrecer un trabajo más cuidado, más humano, menos orientado al mero beneficio económico”. Manuel Rosal, de Athenaica también se muestra optimista: “Se habla mucho de que se publica demasiado y de que el índice de devoluciones es grande. Nosotros publicamos apenas 25 títulos al año y procuramos que sean grandes obras; confiamos en que, una vez pasada la novedad, nuestros libros no se destruirán, sino que formarán parte del fondo editorial”. Por su parte Cascaborra admite: “Pretendemos que nuestros cómics sean entretenidos y que el lector disfrute de un buen rato de lectura eligiendo libremente los temas históricos. Esto nos aleja de las dinámicas del mercado, pero somos conscientes y pagamos gustosos el precio”.

Estas editoriales han apostado, en el mundo del ‘fast food’, por los libros de degustación lenta, algo que parece encajar en la nueva forma de vida. Algunos editores incluso han decidido atrincherarse en sus ciudades o pueblos lejos de las grandes urbes, empujados por la precariedad del sector, pero sobre todo animados por la complicidad de las pequeñas librerías de barrio y los clubes de lectores que cierran un triángulo poderoso de dinamización cultural deslocalizada y muy viva.
La hoguera de las vanidades
“Uno nunca sabe dónde va a encontrar el libro que te haga por fin visible. Sea como fuere, la clave está en el trabajo impecable y en comunicar bien”, afirma Eva Serrano, de Círculo de Tiza. Penélope Acero, de Zenda-Edhasa, a caballo entre Madrid y Barcelona, admite las ventajas de internet, incluso para facilitar las transacciones editoriales en las ferias internacionales del libro como Frankfurt o Guadalajara, adonde acude con regularidad: “Ahora es fácil tener contactos con agentes extranjeros en reuniones ‘on line’. Las ferias nacieron para facilitar el intercambio de libros entre países negociando contrataciones, aunque ahora es diferente; la información ya la tienes antes en el ordenador. Lo interesante allí es afianzar las relaciones humanas, conocer a la gente con la que has hablado y negociado por teléfono”.
A pesar de las dificultades, los éxitos ocurren; satisfacciones pequeñas o sorprendentes por lo inesperado, como el caso singular de Ediciones Menguantes: el álbum ‘Breve Atlas de los Faros del Fin del Mundo (2020)’ se convierte en un éxito, se traduce a más de 10 idiomas y recibe un premio nacional al libro mejor editado, y un año después, ‘Bestiario del Antropoceno’ es galardonado con el mismo reconocimiento. Otra sorpresa editorial fue ‘Feria’, de Ana Iris Simón editada por Círculo de Tiza, se convertía a las pocas semanas en el fenómeno literario del 2021. También la mirada al pasado próximo o lejano tiene sus recompensas: El tótem del posmodernismo, el escritor estadounidense William Gass recuperado por La Navaja Suiza fue aclamado unánimemente por la crítica más exquisita. En cuanto a los clásicos de siempre, ‘Las Cuatro Plumas’ de A.E.W. Mason reeditada por Zenda-Edhasa batió algunos inesperados récords al vender casi nueve mil ejemplares hace apenas dos años.
‘Casino Royale’
Un final de novela de Ian Fleming para este reportaje: las historias de futuro que aquí contamos no podían dejar de incluir contenido audiovisual; por eso decidimos apostar todo al negro sobre blanco de los libros, grabando estas conversaciones en el Real Casino de Madrid, que generosamente nos permitió charlar (en el marco singular de su biblioteca neogótica) con los editores del futuro sobre este presente incierto y aventurero: todos ellos están vinculados al máster de edición de la Universidad Autónoma de Madrid; algunos aún son alumnos como Blanca Domínguez Trejo y otros terminaron hace un año, como es el caso de David Andrés Cabañas y Erika Ambrosio: el primero vinculado profesionalmente a la editorial Altamarea, y la segunda a la librería Alberti de Madrid.
Los jóvenes editores de hoy serán los responsables de las historias que les acompañarán en futuro
El grupo (acompañado por el director académico de este máster desde hace diecisiete años, el catedrático Eduardo Becerra Grande), se completa con Eva Serrano y Bárbara Pérez de Espinosa, que reconocen la importancia de esta formación: “El máster fue la puerta de entrada a un nuevo mundo. Lo más interesante fue escuchar a profesionales del mundo editorial, quienes explicaban a los alumnos sus realidades, el proceso de creación de los libros” … “En mi caso —confiesa Bárbara sonriendo— mi mejor profesora fuiste tú, Eva, alguien con un talento y un olfato innegables. Gracias a tu ejemplo, cuando decidiste fundar tu propia editorial Círculo de Tiza, yo me animé a hacerlo, y así nació La Navaja Suiza”.
Cuenta con formaciones académicas de alto nivel y muchas lecturas a cuestas
Todos han hablado con sinceridad frente a las cámaras, demostrando una ilusión y profesionalidad sorprendentes desde los dos extremos: el de la juventud de sus propuestas y el de la veteranía de la experiencia, ofreciendo siempre una mirada lúcida sobre la dura realidad que enseguida se disuelve como una pastilla efervescente en un vaso lleno hasta el borde de ilusión. La sesión de fotos continua inevitablemente en una librería con veteranía y leyenda: la Antonio Machado, que también tiene un excelente servicio de distribución editorial. Entre libros ya editados que ocultan al lector el ingente trabajo que hay detrás, posan estos tres jóvenes editores: Blanca, Erika y David. No olviden sus nombres, pues ellos y otros tantos compañeros de oficio serán en poco tiempo responsables de las historias que le acompañarán a usted por la noche: viajarán en su mochila, lo consolarán, aturdirán, enriquecerán y enseñarán a entender la realidad desde todas las ficciones posibles. Estos rastreadores de talento estarán detrás de sus sueños, sus regalos de San Jordi, cumpleaños y Navidad; sus inquietudes, sus emociones, sus más profundos secretos. Son los editores del futuro: artesanos de lo eterno en un mundo cada vez más superficial y más efímero..
«El mundo de los toros dentro de unas décadas quiero pensar que va a estar igual de vivo que en estos momentos»

«No quiero perder la curiosidad porque como artista hay que renovar la curiosidad proyecto a proyecto»

«La ópera está muy viva. En unas décadas veo los teatros llenos de gente, de jóvenes y de música»

«No puedo pensar en la muerte del libro o de las formas tradicionales, cuando veo gente tan dispuesta a entregar su vida a la cultura y a la literatura»
