«Gracias a los bomberos, el fuego no llegó a nuestras casas»

Los vecinos de la urbanización La Hacienda de Dos Hermanas, que tuvieron que ser desalojados de sus casas el pasado 16 de julio debido al incendio que se declaró en la fábrica de la empresa Ybarra , ubicada justo al lado, han querido este martes agradecer las labores de extinción desarrolladas por el cuerpo de Bomberos, evitando que las llamas alcanzaran las viviendas. «Gracias a ellos, el fuego no llegó a nuestras casas», ha explicado el presidente de la comunidad de propietarios de esta urbanización, Juan Bilbao, durante el encuentro que han mantenido en el parque de Dos Hermanas con algunos de los efectivos que participaron en el dispositivo de emergencias para sofocar las llamas.

«Les estamos muy agradecidos por su actuación. Demostraron una profesionalidad ejemplar y decidimos en la última reunión vecinal celebrada darles las gracias entregándoles una placa», ha detallado. Así, en la inscripción de dicha placa los vecinos han agradecido al cuerpo de Bomberos de Dos Hermanas y demás compañeros la «ejemplar actuación en el incendio de Ybarra salvando nuestras casas».

El sargento jefe en funciones, Rafael Fernández, ha reconocido, por su parte, que se trata de un « gesto que nos enorgullece y que nos hace sentir mucho mejor », puesto que «esto no da mucho más aliciente que cualquier otro tipo de recompensa». Fernández, que ha reconocido que el de Ybarra ha sido uno de los incendios más grandes en los que ha actuado a lo largo de toda su trayectoria profesional, ha querido dar las gracias a los vecinos por este detalle antes de inmortalizar este encuentro con una fotografía de familia.

Cabe recordar que los vecinos de la urbanización La Hacienda fueron desalojados de sus casas a media tarde del sábado, 16 de julio, por motivos de seguridad debido a la magnitud del incendio de Ybarra, cuyas instalaciones se encuentran ubicadas a escasos metros de las viviendas. Los vecinos estuvieron fuera de sus casas más de 24 horas , ya que no fue hasta el domingo por la noche cuando algunos pudieron regresar a sus hogares. No hubo que lamentar daños personales ni tampoco materiales, si bien sólo resultaron afectados algunos setos de los jardines más próximos a la fábrica.