El Cristo de Burgos no apura y decide no salir seis horas antes: «No hace falta llevar las cosas al límite»
El hermano mayor, Alberto Martín, explica a ABC que los pronósticos son muy malos para la noche y que no han querido mantener en vilo a los hermanos toda la tarde
Público masivo y calles taponadas complican los primeros días de la Semana Santa de Sevilla
Miércoles Santo de locos en Sevilla a la hora de planificar la jornada salvo para una cofradía: el Cristo de Burgos, que ha comunicado su decisión de no poner la cruz de guía en la calle poco antes de las tres y media de la tarde, cuando restaban unas seis horas para su salida oficial. Esa anticipación no es nada común en la Semana Santa sevillana donde las corporaciones apuran hasta el último momento, incluso pidiendo prórrogas aunque esté lloviendo en ese preciso instante. El hermano mayor, Alberto Martín, ha atendido la llamada de ABC y ha explicado que a pesar de ser una decisión dura, se ha pensado principalmente en los hermanos:
«Los pronósticos que tenemos para la noche son muy malos y no hace falta llevar las cosas al límite. No queríamos tener en vilo a los hermanos toda la tarde, hacerles venir a la iglesia con el hábito para después decirles que no se salía», ha dicho Alberto Martín.
En la Junta de Gobierno del Cristo de Burgos no ha habido debate. Sobre las tres de la tarde, ha detallado Martín, se han reunido sus miembros y el voto ha sido unánime a la suspensión de la procesión. «A partir de las doce de la noche, el pronóstico es muy malo y nuestra cofradía es la última en salir y con un horario muy tardío. No había opción». El hermano mayor apunta no sólo a la lluvia que está apareciendo de manera intermitente en esta jornada del Miércoles Santo. «No es sólo el agua, es que hace un viento muy fuerte». Unas rachas que han llevado al Ayuntamiento a cerrar los parques de manera preventiva.
La decisión tan anticipada no es nada frecuente. En el Cristo de Burgos, su hermano mayor no recuerda precedentes con tanta antelación como lo de este Miércoles Santo, pero insiste que han querido cuidar a sus hermanos. «Tenemos un patrimonio no sólo artístico sino humano».
A las ocho de la tarde, en el interior de San Pedro se celebrará un vía crucis al que están llamados todos los hermanos y después se abrirán las puertas del templo para que los sevillanos puedan ver los pasos.
Se da la circunstancia que la decisión del Cristo de Burgos, que se ha oficializado a través de un comunicado en redes sociales, ha coincidido prácticamente con el momento de la apertura de las puertas en la iglesia de San Antonio Padua y de Omnium Sanctorum. Las hermandades del Buen Fin y del Carmen -por ese orden- confirmaban poco antes de las tres de la tarde que ponían sus pasos a la calle. Unas decisiones que llegaban en un momento de lluvia y de paraguas abiertos en la calle.
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