cuaresma
Cinco momentos, cinco imágenes: un segundo fin de semana de Cuaresma para el recuerdo
Las cofradías ofrecieron estampas inigualables, algunas extraordinarias, en estos días cuaresmales
Programa de la Semana Santa de Sevilla 2025
Cientos de estampas imborrables producidas en el segundo fin de semana de Cuaresma para el recuerdo, a cual mejor, después de todo lo celebrado estos días con pleno de salidas, con multitud de besamanos, actos y cultos de carácter extraordinario, quedando palpable que la tradición está muy presente ante una sociedad cada vez menos creyente y cambios de estilos en una ciudad repleta de turismo, como está ocurriendo en la mayor parte del país.
La fe sigue viva, al igual que las devociones y el incansable trabajo diario de tantas personas que se esfuerzan por engrandecer a sus titulares. Aunque no se vean siempre, sin su dedicación nada sería posible en esta tierra de la eterna primavera. Cada uno lleva sus momentos más destacados de lo vivido estos días, sus fotos inmortalizadas con una máquina o con la retina de los ojos. En Pasión en Sevilla, esta vez, se destaca, entre tanto donde elegir, lo extraordinario.
El Cristo de la Expiración del Museo no solo ha protagonizado una de las estampas más destacadas de la Cuaresma, sino de todo el año, por varias razones. Primero, por salir de manera extraordinaria sobre unas andas de nueva factura, erguido, emulando en parte su paso de salida. También por el hecho de ser disfrutado en el lugar de fundación de la hermandad, en San Andrés, y por su presencia en la calle a plena luz del día, algo que no ocurría desde su participación en el Santo Entierro Grande de 1992 o desde su salida, aunque tumbado, en el Vía Crucis de las Cofradías.
Ls Cigarreras, debido a las obras de Altadis, está ofreciendo recuerdos verdaderamente insuperables. El esfuerzo que está realizando la corporación es considerable, enfrentando adversidades, pero el trabajo está siendo ampliamente recompensado. La Virgen de la Victoria estuvo en besamanos en la capilla del colegio de Santa Ana, una ocasión que ha dejado una huella profunda entre todos, un templo que visita cada dos años en el rosario de la aurora del primer domingo de octubre y el destino ha querido mostrar un momento tan maravilloso como este.
En el mundo de las cofradías se guarda con añoranza el recuerdo de aquellos vía crucis delCristo de la Corona por el patio de los Naranjos. Ahora, con motivo del 25 aniversario de la fundación de la corporación, el Señor volvió a celebrar un vía crucis, esta vez por la feligresía del Sagrario, de forma memorable. Fue la salida extraordinaria de la imagen, el emblema de la hermandad, sin necesidad de un paso, solo unas andas, para valorar su presencia en las calles, marcado por una gran solemnidad, de evangelizar de forma sencilla y elegante, en una tarde noche marcada por una luz en la mayor parte de recorrido memorable que envolvió al Nazareno en esta salida.
No podía pasar desapercibida la Virgen de los Dolores de los Servitas nuevamente. Parecía impensable verla alguna vez bajo palio junto al Cristo de la Providencia, pero ese momento finalmente se hizo realidad, encima a plena luz del día, saliendo desde San Marcos tras la función principal de instituto. Breve traslado e intenso.
Cada salida de laVirgen de la Estrella es admirable, a cual mejor. Este domingo regresó junto al Señor de las Penas a su capilla, después de unos de los cultos de mayor impacto instalados en San Jacinto y de cuantos son montados en las cofradías. Una mañana de puro barrio, deleite para todos los sentidos con los titulares de esta hermandad por las calles de Triana.
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