festividad virgen de los reyes

El arzobispo de Sevilla: «El proyecto de vida cristiano se ve continuamente despreciado y amenazado»

Monseñor Saiz Meneses ha ofrecido una homilía reivindicativa en la misa posterior a la procesión de la patrona

Cita ejemplar de Sevilla con su patrona

El arzobispo de Sevilla ante la Virgen de los Reyes manuel gómez

El arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses, ha presidido la misa estacional que se ha celebrado en la nave del Crucero de la Catedral de Sevilla al término de la procesión de la patrona. Su homilía ha vuelto a estar cargada de defensa de la fe cristiana en unos tiempos en los que no está precisamente de moda declararse creyente. «Cuesta cada vez más integrar el mensaje evangélico en la experiencia cotidiana, crece la dificultad de vivir la fe en Jesús en un contexto social y cultural en que el proyecto cristiano de vida se ve continuamente despreciado y amenazado».

El texto íntegro de la homilía del arzobispo se puede consultar en la web de la Archidiócesis con una clara vocación de que los mensajes que contiene tengan una amplia difusión. Buena parte de su intervención se ha centrado en el avance del laicismo en Europa como contraposición de un desinterés mayor de la sociedad por la religión. «En no pocos ambientes es más fácil declararse agnóstico que creyente; a veces se tiene la impresión de que lo lógico es no creer, y que la opción creyente requiere una legitimación social que no es indiscutible ni puede darse por descontada».

Durante la ceremonia, monseñor Saiz Meneses ha estado acompañado de los dos obispos auxiliares, Teodoro León y Ramón Valdivia; además de los miembros del Cabildo Catedral, con su deán, Francisco José Ortiz, al frente. También han estado presentes los predicadores de las novenas matinal y vespertina de este año, Marcelino Manzano y Antonio Bueno, respectivamente. Del lado civil, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, que no había podido acudir a la procesión por el esguince que sufre, ha estado entre las autoridades.

La amenaza sobre el cristianismo la ha ligado el arzobispo con conflictos bélicos actuales. Ha mandado un recuerdo a «nuestros hermanos de Tierra Santa, de Ucrania, de Sudán del Sur y de tantos lugares golpeados por el odio, la violencia y todo tipo de conflictos. Vivimos tiempos extraños en los que se hace presente el mal a través de la guerra, de la injusticia, del descarte de los más débiles, de fuerzas destructivas nuevas, y en nuestro occidente rico, también a través del desprecio a lo más sagrado, poniendo de manifiesto la pérdida de la memoria y la herencia cristianas».

La decadencia de Occidente

Son lo que el arzobispo ha calificado como «signos de decadencia cultural y espiritual en nuestra Europa cristiana que a veces parece olvidar sus raíces». En cambio, ha advertido que «no se puede construir la ciudad de los hombres prescindiendo de Dios o contra Él». Por eso, ha abogado por «trabajar para mantener vivos y operantes los cimientos espirituales, las raíces cristianas de nuestra tierra, poner a Dios en el centro y los derechos humanos como valores que preceden a cualquier jurisdicción estatal».

En la parte final de su homilía, el arzobispo ha hecho un alegato a la esperanza: «Seguimos haciendo camino con confianza y perseverancia, conscientes de que Cristo resucitado está en medio de nosotros, la Virgen de los Reyes nos lleva de la mano, y de que no peregrinamos solos, sino en la compañía de los hermanos. Cuando estemos cansados y agobiados vengamos aquí, porque ella nos reconfortará», ha concluido.

Artículo para suscriptores

¡Prueba ahora dos meses por solo 1€!

Ver comentarios