La tradición cultural en torno a los cítricos protagoniza el inicio de Hay Fórum Sevilla

Previamente a la intervención de ambos ha habido un breve acto institucional en el que han hablado los diferentes responsables que están detrás de que este evento se celebre en la capital hispalense por primera vez. De este modo, la directora de Hay Festival, Sheila Cremaschi, ha agradecido al alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, el apoyo que ha prestado al festival, así como a las consejerías de Turismo, Cultura y Deporte y de la presidencia. «Este es un día fundacional lleno de alegría y emoción porque tu sueño se concreta».

La directora de la Fundación Banco Sabadell, Sonia Mulero, ha confesado estar «enamorada de Sevilla» y ha añadido que se trata de un «festival maravilloso en el que nos implicamos desde su creación. Consideramos la cultura como elemento transformador. Nos hemos implicado con la Real Maestranza y con el Festival de Cine. Ahora también nos volcaremos con el Ayuntamiento en estos próximos años».

Tras una breve pero brillante intervención de una de las ponentes en este certamen, la poeta sevillana Victoria León, que ha dicho que para ella es «un honor y un privilegio dar la bienvenida a este Hay Fórum», destacando también su «vocación humanista y universal, el viceconsejero de Turismo, Cultura y Deporte, Víctor González ha felicitado a Sheila Cremaschi «por la apuesta que ha hecho por Sevilla». Igualmente ha hecho con Sonia Mulero, «por el apoyo que nos han dado administraciones privadas como la Fundación Banco Sabadell». Asimismo, ha agradecido a José Luis Sanz, «por la pasión que tiene por la cultura, y la delegada de Cultura, Minerva Salas, con la que he trabajado y que conoce muy bien la cultura de Sevilla. También destaco el apoyo del viceconsejero de Presidencia, Tomás Burgos».

González ha concluido diciendo que «dentro de poco se cumple el centenario de la exposición del 29. Se hablará en Hay Fórum sobre cuestiones candentes como el cambio climático. También se reflexionará sobre arquitectura y sobre la personalidad de la ciudad. Hay un gran elenco de pensadores. Se estudiarán las guerras y ciudades que han hecho evolucionar las ciudades».

La inauguración oficial ha concluido con la intervención con José Luis Sanz, que ha resaltado que el Alcázar es un «rincón único de la ciudad». También ha apelado a Sheila Cremaschi, a quien le ha dicho que «no te has equivocado por elegir Sevilla porque es una de las grandes ciudades culturales de Europa y una ciudad diversa. Es sede de grandes eventos culturales y deportivos. Sevilla quiere ser la capital cultural del sur de España. Deseamos la cultura como motor de cambio y transformación social, que a esta ciudad le viene muy bien. Este gran foro de debate le viene muy bien a Sevilla pensando en la celebración del 29 y en la transformación que tendrá en el futuro».

Tras unos minutos de descanso, ha comenzado un diálogo entre Vicente Todolí, curador de arte y director de la Todolí Citrus Fundació, y Lorenzo de' Medici, escritor y gran amante de la cultura. El príncipe italiano ha aclarado que «no soy coleccionista de cítricos. En mi familia todos han nacido con el vicio del coleccionismo, ya fueran cuadros, estatuas, joyas, muebles, etc. En 1540, Cosme I se interesa por los cítricos gracias a su esposa, Leonor Álvarez de Toledo. Ella nació en Napoles y le pidió a Cosme que plantara cítricos de Nápoles y Sicilia para inundar sus jardines de aromas. Leonor fue la gran coleccionista de cítricos. Cosme III siguió la tradición. Posteriormente, construyeron los palacios con calefacción y cristaleras para proteger los cítricos».

Vicente Todolí ha subrayado que Cosme «estaba frustrado porque quería un cítrico totalmente toscano, la bizarria. A Cosme I le regalaban arte o cítricos. Un mismo árbol podía dar frutos amargos, más dulces y bizarria, que no es un injerto. Esta se perdió pero se fue recuperado hace poco.

Lorenzo de' Medici ha comentado también que «los italianos son muy avanzados en crear nuevos cítricos», mientras que Vicente Todolí ha dicho que «Alejandro VI se lleva a Roma la alubia de Valencia ara crear una medicina. Esa alubia desapareció de Valencia. En Italia se conservó en la Toscana. Italia es un país donde se conservan esas variedades de cítricos y lo consideran algo cultural. Respetan lo pasado, la historia. En España no. En Italia son especialistas en marketing y también conservan. En España domina lo comercial».

Todolí es experto en Historia y en Historia del Arte. Decidió hacerse curador de arte tras visitar la Bienal de Venecia. «Mi primer proyecto agrícola fue en 1990, al sur de Valencia. El segundo fue un pequeño huerto de cítricos. En 2000 publicamos un libro sobre Ferrán Adrià. Él me descubrió un sitio en Perpignan con más de 400 cítricos. Investigué y puse en mi huerto una colección de 25 variedades de cítricos. Tuve la idea de hacer una fundación para parar un proyecto urbanístico y para salvar una parcela de tierra que iba a ser urbanizada. Descubrí que los Medici fueron los primeros coleccionistas de cítricos. Ahí descubrí la relación entre el arte y la citricultura».

Este curador ha añadido que los cítricos tienen hojas perennes. Casi siempre hay frutos en el árbol y a veces coinciden frutos verdes y otros maduros. «Los cítricos nacen hace 8000 años al pie del Himalaya. Se extienden por la India, China y Japón. Donde primero fueron cultivados fue en Japón y luego en Italia». Por su parte, Lorenzo de' Medici ha señalado que «el primer jardín de la historia fue de los Medici. Leon Battista Alberti decía que entre la casa y el campo debía haber un espacio. Villa Medici es la primera en seguir las indicaciones de Alberti, ya que construyeron un jardín entre la casa y el bosque».