cine
Estrenan 'Summers el rebelde', documental que retrata las luces y las sombras de Manolo Summers
La película, dirigida por Miguel Olid, llega este viernes en las carteleras
Miguel Olid: «Manolo Summers fue un tipo solo ante el peligro, un auténtico llanero solitario»
Un documental de Miguel Olid sacará del olvido a Manolo Summers
La Universidad de Sevilla dedica un seminario homenaje a Manolo Summers
![Miguel Olid ha dirigido el documental 'Summers el rebelde'](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/sevilla/2024/03/14/miguel-olid-estreno-RFnsat2W5smwJU3RtHWgRpJ-758x531@diario_abc.jpg)
La obra del sevillano Manolo Summers es difícil de clasificar, sobre todo porque siempre mantuvo una postura muy independiente dentro del cine español. Este humorista y cineasta filmó una veintena de largometrajes, entre los cuales se encuentran auténticas obras maestras del séptimo arte español, como 'Del rosa... al amarillo' (1963), 'La niña de luto' (1964) o 'Juguetes rotos' (1966). Por ese motivo, el también sevillano Miguel Olid ha decidido rescatar del olvido la figura de este gran director reivindicando su figura en el documental 'Summers el rebelde', que se estrena este viernes en las carteleras de los cines España y que ese jueves por la noche se preestrena en el cine Odeon Plaza de Armas.
Producido por Plano Subjetivo, La Claqueta P.C., Indaloymedia y Arte Sonora Estudios, el origen de este proyecto habría que remontarlo hacia el año 2017, cuando Miguel Olid y el productor de La Claqueta, Olmo Figueredo, comenzaron a pensar en dedicarle un documental al realizador sevillano. «Lo más difícil fue conseguir la financiación y los apoyos, que nos ha llevado más tiempo. Comenzamos a rodarlo en enero del año pasado y hemos tardado un año en todo el proceso, incluido el montaje», destaca Olid, que también es guionista del filme.
Aparte de la colaboración absoluta de la familia, que ha facilitado todo tipo de material, además de testimonios valiosos de Guillermo Summers y David Summers -uno de sus hermanos y su hijo-, a la hora de recurrir a la figura de este cineasta, el equipo ha consultado muchas horas de archivo de Televisión Española y de Canal Sur Televisión. «Ha sido valiosísimo. En Canal Sur había menos entrevistas, pero eran más en profundidad y pertenecían a su última etapa. Ahí vemos a un Summers más autocrítico y con otra perspectiva a la habitual. Fueron sus dos últimas más entrevistas antes de que enfermera. En Televisión Española el material es muy distinto, porque se trata de entrevistas que le hicieron en los años setenta y en los ochenta y muestra su lado más polémico, pero su lado más reflexivo lo encontramos en ese material de Canal Sur», dice este experto en Historia del Cine.
En esta película aparecen testimonios de personas que tuvieron mucho contacto con Summers, como José Luis Garci, Luis María Ansón, José Antonio Sáinz Vicuña, Tote Trenas, Beatriz Galbó, Fernando Trueba. Igualmente destaca la figura del crítico de cine Mirito Torreiro, que se muestra especialmente en contra del cine más comercial que Summers hizo a lo largo de su carrera. «Siempre tuve claro que no quería hacer una hagiografía, ni tampoco una biografía lineal, porque precisamente estoy escribiendo una biografía. El cine de Summers fue muy cuestionado por un sector importante de la crítica en los años setenta y ochenta. Yo me crie en aquella época y recuerdo que a principios de los ochenta la crítica era muy dura con él. Por eso entendía que ese sector de la crítica tenía que estar presente». En el propio documental se muestra el gran rechazo que los críticos de cine producían en el director de 'Adiós, cigüeña, adiós'.
Los directores más críticos
Los propios directores de cine de la época se mostraron muy divididos con respecto a su figura. Sin en el documental recibe elogios de directores del prestigio de Basilio Martín Patino, Luis García Berlanga, José Luis Garci y Fernando Trueba. «Normalmente un periodista no critica a otro periodista, ni un abogado a otro abogado, pero con Summers esa regla se rompe. Hubo directores que decían que le encantaba su cine y que era un genio, pero otros se mostraron muy en contra de sus películas, como Jaime Chávarri, que decía que se aburría, o Carlos Saura, que lo definió como un cine frívolo que no le interesaba», dice Miguel Olid.
Este doctor en Comunicación por la Universidad de Sevilla resalta especialmente el rechazo que le producía el cine de Summers al actual director de la Academia de Cine, Fernando Méndez Leite. «Para Summers, Méndez Leite era su némesis, y se puede decir que para Méndez Leite, Summers fue también su némesis. Siempre quise contar con Méndez Leite para mi documental. Me invitaron a un programa de Televisión Española y me enteré de que iba a participar. Al final del programa hablé de mi proyecto del documental y dije que quería contar con opiniones críticas como la de Méndez Leite. Pero esto no pudo ser porque él, como director de la Academia, no puede opinar mal sobre un director español si él defiende todo el cine español», dice este investigador.
El documental muestra también a la perfección cómo Summers estuvo oscilando siempre entre películas más personales y de autor como 'Juguetes rotos', a la vez que también sacaba otras mucho más comerciales como 'Adiós, cigüeña, adiós' (1971), que causó un gran impacto en la sociedad franquista de la época. En la película se cuenta cómo miles de jóvenes hicieron una campaña de firmas para poder verla. Esta cinta contó en España con 3.500.000 de espectadores y también tuvo un gran éxito en Hispanoamérica y en países de Europa, superando la recaudación de otros filmes como 'El padrino' o 'Love Story'. «Él se arruinó con 'Juguetes rotos', por eso tuvo que hacer cine más comercial. Posteriormente volvió a hacer cine más personal, pero nunca contó con el respaldo del público, y no le quedó otra que hacer películas más comerciales», dice Olid. Tanto en esta como en otras películas suyas, Summers también tuvo problemas para sortear la censura de su tiempo.
Preguntado por cuáles son a su juicio los mejores filmes de este realizador, el director del documental apuesta por la trilogía de los años sesenta: 'Del rosa... al amarillo', 'La niña de luto' y 'Juguetes rotos'. «Esas películas son fundamentales. Pero en los años ochenta sacó dos películas muy personales que prácticamente no ha visto nadie, 'Ángeles gordos' (1980) y 'Me hace falta un bigote' (1986). En esas películas vuelve a sus orígenes y 'Me hace falta un bigote' tiene mucho en común con 'De rosa... al amarillo'. De hecho, comienza donde acaba esta última».
Aparte de la biografía que está preparando Miguel Olid sobre Manolo Summers, que espera acabar este año y que está aún pendiente de ser acogida por alguna editorial que apueste por ella, este historiador de cine ha promovido en los últimos meses una exposición sobre Summers en Huelva que ha tenido mucho éxito y un seminario en la Universidad de Sevilla en el que se han proyectado sus principales películas. Incluso ha puesto en marcha un campaña a través de Change.org para dedicarle una calle en Sevilla. «Es increíble que un director que siempre presumió de ser sevillano no tenga una calle en su ciudad. En el documental por ejemplo hemos recibido apoyos de la Diputación de Huelva, pero no hemos recibido apoyos institucionales de Sevilla», concluye.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete