Más de 50.000 hogares sevillanos, en situación de pobreza energética

Sin embargo con el recibo de la luz cada vez más caro y la mayoría de los sueldos congelados o recortados por la crisis sanitaria, cada vez son más las familias que pasan apuros para poder hacer frente al gasto de calentar el hogar.

De hecho, en Sevilla hay 50.000 hogares en situación de pobreza energética o que lo estarían si no fuera porque reciben ayudas para pagar los recibos de la luz. Según Endesa, en la provincia hay más de 50.000 hogares con el bono social impulsado por el Gobierno central para paliar la pobreza energética.

Es un dato que supone que las familias en esa situación son el 5 por ciento de los hogares sevillanos y el 7 por ciento de los que tiene contrato con Endesa, la compañía que gestiona en Sevilla 710.000 hogares del total de los 950.000 de la provincia. De entre los que necesitan ayuda para pagar esos recibos, hay 18.600 en Sevilla capital y el resto en la provincia.

En cualquier caso, no todos esos hogares están en las mismas condiciones para afrontar esos recibos que se ven incrementados en los meses que más bajan las temperaturas.

Así, de los 50.000 un total de 26.264 son clientes vulnerables y cuentan con una rebaja del 60 por ciento en la factura de consumo eléctrico, y 23.834 son clientes vulnerables severos, para los que se establece una reducción del 70 por ciento. Son unos descuentos que ahora son más grandes pero que, a partir de abril de este año bajarán al 25 por ciento para clientes vulnerables y al 40 para los vulnerables severos.

Esa situación de vulnerabilidad se ha agudizado por la pandemia que ha provocado despidos y Ertes. Según Endesa durante 2021 se registró un aumento en el número de peticiones de este beneficio en comparativa con el año anterior. Así al cierre del pasado año los clientes vulnerables habían aumentado un 11 por ciento y los vulnerables severos un 14 por ciento, lo que supone un incremento del número de beneficiarios de un 13 por ciento en términos generales. Además, hay que tener en cuenta que los consumidores que tienen este bono social pueden beneficiarse del bono social térmico , una ayuda económica directa destinada directamente a compensar los gastos de calefacción, agua caliente y cocina.

A esas cifras facilitadas por Endesa hay que sumar las que maneja el Ayuntamiento de Sevilla, que también ofrece ayudas para las familias con problemas desde que en 2016 comenzó a desplegar su propia estrategia contra la pobreza energética con las principales compañías suministradoras de electricidad y gas para que no se corte el suministro a las familias por motivos económicos. Eso significa que el Ayuntamiento asume el recibo previa valoración de la vulnerabilidad social de estas familias por parte de técnicos municipales.

En 2020 se concedieron ayudas municipales para suministros básicos (el 95 por ciento son luz y gas) a 684 familias, con un importe de 309.323,5 euros. Esas cifras también cuadran con otra que maneja el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, IECA, que indica que hay un 11,6 por ciento de hogares que no puede permitirse el gasto de mantener la vivienda a un a temperatura adecuada.

¿Como se protegen los sevillanos contra el frío? En Sevilla, según el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía el 91 por ciento de los hogares tiene calefacción aunque el porcentaje baja al 85 por ciento en cuanto a los que se trata de calefacción eléctrica. Pero también hay muchas viviendas que lo compatibilizan con otros métodos más tradicionales como el radiador.

De hecho, fuentes de Endesa aseguran que en Sevilla no prima mayoritariamente el sistema de calefacción centralizada como en otras ciudades. «No hay mucha cultura de calefacción en la vivienda» , aseguran desde la compañía donde han constatado que hay otras provincias como Granada o Córdoba con una mayor costumbre de esas instalaciones. En esas ciudades tienen más contratos de mantenimientos de calderas que en Sevilla. En cualquier caso, cada vez quedan menos edificios con calefacción centralizada, algo que ya sólo se ve en algunos inmuebles más antiguos.

Frente a ello hay otras fórmulas más modernas y menos contaminantes para calentar las viviendas. Según la Agencia Andaluza de la Energía, desde que comenzó en 2017 el Programa para el Desarrollo Energético Sostenible de Andalucía que contempla actuaciones de mejora energética para reducir la demanda y utilizar la energía de forma más inteligente , en la provincia de Sevilla se han invertido cerca de 2 millones de euros en 282 estufas o calderas de biomasa que utilizan pellets. Se trata de generadores de calor de madera para realizar la combustión dentro de una cámara cerrada, emitiendo calor con una fuente de energía renovable. En este periodo 38 hogares han optado por equipos de climatización más eficiente.

Y luego están los más tradicionales que siguen usando los braseros (en muchos hogares compatibles con otras fórmulas para darse calor). No hay datos oficiales sobre cuántos sevillanos tienen la tradicional mesa de camilla con uno de ellos pero en las ferreterías se siguen vendiendo como rosquillas cuando llega el frío.