Guerra en los taxistas del aeropuerto de Sevilla: la asociación que controla la parada se parte en dos

Mientras tanto la asociación sigue siendo epicentro de una causa judicial. De hecho, el pasado mes de febrero la juez de Instrucción número 8 de Sevilla cerró la investigación de la que se ha venido denominando macrocausa de la «mafia del taxi» por las agresiones y coacciones de los miembros de la Asociación Hispalense Solidaridad del Taxi en las instalaciones del aeropuerto a otros servicios de transportes como los vehículos de transporte concertado (VTC) o el autobús público. Ha procesado a 27 taxistas y a la propia asociación por «organización criminal, coacciones y daños». Aunque la Audiencia de Sevilla, después, claraba la «inutilizabilidad» de las pruebas acordadas en esta macrocausa después de enero de 2018, lo que podría suponer la nulidad de gran parte de la instrucción y afectar a dicho procesamiento.

El último episodio que refleja la situación de tensión que se vive en el seno de la asociación es la denuncia que ha interpuesto ante la Guardia Civil Enrique Filgueras, expresidente de la misma, a Francisco Román, actual presidente del comité de conflictos de la asociación , por amenazas. Ya ha llegado a los juzgados.

El pasado 24 de mayo Filgueras se personó en el cuartel de La Rinconada para poner en conocimiento de los agentes de la Guardia Civil las presuntas amenazas que estaba recibiendo «por parte de personas identificadas y pertenecientes» a la asociación.

Y Filgueras le explicó a los guardias civiles cual era el origen de las amenazas : el análisis de unos documentos que desvelan «la supuesta mala gestión de los servicios y los fondos» por parte de la actual junta, liderada por Antonio Velarde.

En una de las últimas asambleas celebradas, «una supuesta revisión de las cuotas de los socios» derivó en un conflicto entre varios socios. Allí se pidió a Filgueras, como antiguo presidente, que hiciera una valoración de la situación analizando unos documentos que hacían referencia a la gestión de la asociación desde que Filgueras dejó la presidencia hasta la fecha, pasando por la pandemia del Covid .

Filgueras hizo públicas las conclusiones y ahí comenzaron las amenazas contra él. ¿Cuáles eran esas conclusiones? Según el expresidente de la asociación, « la mayoría de los servicios prestados« durante la pandemia en el aeropuerto (sobre todo para trasladar a hoteles a los miembros de las tripulaciones de los pocos aviones que viajaban en esos momentos) «han sido asignados entre el vicepresidente, vocales o familiares y amigos de éstos «, perjudicando al resto profesionales.

En este sentido, Filgueras aporta a la Guardia Civil un documento en el que se recogen el número de licencias que realizaron estos servicios entre junio de 2020 y agosto de 2021 , además de los cargos o costes de estos viajes. Dicho análisis indicaba que 147 licencias de la asociación prestaron 567 viajes, por un total de 12.707 euros. Y, según el estudio de Filgueras recogido en la denuncia a la que ha tenido acceso este periódico, «el 53,2 por ciento de las licencias, esto es 168, no han realizado ni un solo servicio». Y 48 licencias han hecho un servicio, de los que 26 servicios fueron del cargo mínimo, 13,50 euros.

Después, hay cinco licencias que han hecho 87 servicios y estas licencias corresponden al actual vicepresidente de la asociación (31 servicios), el presidente del comité de conflictos (11 servicios), un vocal (16 servicios) y el hermano de este vocal (29 servicios).

Filgueras le contó a la Guardia Civil que cuando expuso públicamente sus análisis entre los miembros de la asociación comenzó a recibir «amenazas y coacciones». « Si sale algo a la luz o algo de los descrito sale a luz, que se atenga a las consecuencias «. Eran las palabras que se podía escuchar en un audio de voz que ha circulado estos días.

También denunció Filgueras que le habían amenazado con hacerle daño a su coche. En el argot de este gremio se usa la expresión «pasarle la pre-ITV «. Además, trasladó a los agentes que el denunciado Francisco Román, sobrino del actual tesorero, lo acusa en grupos de WhatsApp de »prevaricar« con dinero de la asociación.

Es el último episodio que deja el ambiente de «bastante tensión» que se vive en la asociación, donde el «distanciamiento» claro de los bandos está dando lugar a enfrentamientos y peleas, según ha podido conocer este periódico. Los incidentes han vuelto «a diario» al aeropuerto .

En este contexto se ha solicitado un adelanto de las elecciones en la asociación , que previsiblemente se celebrará el próximo otoño. Como línea continuista parece que el actual vicepresidente, Jesús Moreno, podría presentar su candidatura. Del grupo de Filgueras estaría Ángel Romo, actual secretario de la junta directiva de Antonio Velarde. De esta parte ha habido un intento de adelantar las elecciones, pero ha sido infructuoso. El poder de la asociación que controla el servicio de taxis del aeropuerto está en juego .

Las críticas hacia la actual gestión no arrecian. Filgueras y Romo han indicado a este periódico que han perdido el uso del bar del aeropuerto que ahora ha licitado Aena y caerá en manos privados, así como también han perdido representatividad en el órgano de negociación de los taxistas en el Ayuntamiento en favor de otra asociación del gremio.

Además, apuntan que durante el tiempo de gestión de Antonio Velarde los miembros de la asociación han recibido multas por valor total de 36.000 euros por un problema durante un congreso de profesionales en Fibes. Otros reproches a la actual dirección es la opacidad en las cuentas de la asociación, que gestiona un presupuesto superior a los 30.000 euros y que llevan «cuatro años sin publicar» , o la admisión de «amigos» en la asociación por delante de los profesionales que están apuntados a una lista de espera.