Sevilla, sin policías locales suficientes para el dispositivo de la Vuelta Ciclista
Los primeros cortes de tráfico los han estado haciendo agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional al negarse los funcionarios municipales a realizar horas extras
El Ayuntamiento asegura que el dispositivo de seguridad se está celebrando sin incidentes
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El dispositivo de seguridad de cara a la quinta etapa de la Vuelta Ciclista a España que llega este miércoles a Sevilla tiene una pata que cojea, la que deberían sostener los efectivos de la Policía Local. La principal competencia de este cuerpo es el control del tráfico dentro del término municipal de Sevilla. Por eso eran una pieza fundamental en el operativo que se ha empezado a desplegar este martes por la tarde. Pero no hay policías locales suficientes. Fuentes de la plantilla han confirmado que la mayoría ha rechazado hacer horas extras para cubrir esta jornada.
Esa protesta soterrada tuvo sus primeros efectos visibles para la ciudadanía a primera hora. A partir de las ocho de la mañana se empezaron a realizar cortes y desvío de tráficos en el entorno del Paseo Colón donde se ubica la meta y en las inmediaciones del recorrido, en especial el del último tramo que traviesa la Avenida de la Palmera. Los conductores que se toparon con esos primeros cortes no vieron a agentes de la Policía Local sino a miembros de la Benemérita y de la Policía Nacional, ejerciendo unas funciones que les compete a los funcionarios policiales. A pesar de todo, desde el Ayuntamiento se insiste que el operativo previsto estaba funcionando bien y lo cierto es que no se registraron problemas.
Pero también es cierto que en gran parte fue por el apoyo que prestó la Policía Nacional, Guardia Civil y Protección Civil. Unos voluntarios a los que se vio incluso dando indicaciones al paso de los ciclistas. La retransmisión televisiva desde el aire dejó en evidencia esta situación.
Fuentes municipales detallan a ABC que hace mes y medio, la jefatura comunicó que hacían falta unos 600 servicios para cubrir este evento que ha cogido en mitad de las vacaciones de agosto, cuando buena parte de la plantilla municipal está de descanso. Los sindicatos trasladaron que el trabajo por esa jornada debería compensarse como un festivo. Hay que recordar que en la negociación de las pasadas fiestas de la primavera, la Policía Local arrancó una ventajosa compensación por trabajar en jornadas que no están dentro de su calendario ordinario.
Así, el concepto de trabajar una jornada festiva se compensaba gracias a ese acuerdo mediante varias opciones a elegir por el funcionario: disfrutar de dos días de descanso; cobrar uno de esos dos días y descansar el otro; o solicitar el abono de una jornada y la otra mediante el pago de ocho horas extras. El cobro de una jornada como ocho horas extras equivale a una remuneración media bruta de 240 euros. Una cantidad que se suma al sueldo base por una jornada y la parte proporcional de los complementos que tenga reconocido cada funcionario.
La jefatura estimó que hacían falta unos 600 servicios para cubrir con garantías el dispositivo, pero no se ha llegado ni a la mitad.
Desde la jefatura se negó remunerar de esta manera y realizó un último ofrecimiento de compensar esa jornada a cambio del abono de ocho horas extras. Una propuesta que no ha convencido al grueso de la plantilla que no han cubierto ni la mitad de esa previsión inicial de servicios tal y como queda recogido en la orden del cuerpo para el día de hoy a la que ha tenido acceso ABC.
Desde CSIF señalan que el ambiente de hartazgo entre los agentes es grande porque «se les sigue adeudando cantidades de 2022 y los compromisos adquiridos por el Ayuntamiento para Semana Santa y Feria no se han visto reflejados aún en la nómina», señala el delegado de esta central sindical, Santiago Raposo. «No sabemos si los que hoy van a trabajar de descanso han echado sus números, pero a nosotros por venir un día en agosto de tus vacaciones a trabajar por esa cantidad de dinero en bruto…la verdad es que no nos salen las cuentas, pero cada uno es libre de hacer lo que le venga en gana«, señala un comunicado enviado por este sindicato.
Todos los sindicatos en el cuerpo han pedido a la plantilla que no realicen horas extraordinarias que es la única vía disponible que tiene el Ayuntamiento para disponer de más agentes en un momento puntual. Estos servicios son voluntarios y por tanto se han convertido en una potente arma de presión de cara al Consistorio. La falta de agentes frente al incremento de eventos que se celebran en la ciudad han ido incrementando año tras año la factura que paga el Consistorio sólo en horas extras de estos funcionarios municipales.
Este sistema de remuneración que se viene articulando hace años en el Ayuntamiento de Sevilla para compensar el déficit de personal ha provocado que la Intervención emita varios informes de reparo advirtiendo de que se está empleando una fórmula de pago para conceptos extraordinarios, que tienen una especial cuantía, como remuneración de servicios que tienen una naturaleza ordinaria. Unos avisos que pueden acabar teniendo consecuencias legales.
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