Un mapping recrea la piedad popular en la Catedral de Sevilla

En la tarde de este jueves, tuvo lugar la presentación de la nueva visita catequética-cultural, que no dejó indiferente a ninguno de los presentes. Momentos previos a la proyección, el deán de la Catedral de Sevilla, Francisco José Ortiz Bernal, expresó la voluntad del cabildo de utilizar nuevos métodos con los que mostrar «este gran tesoro», con el que el pueblo sevillano y sus visitantes pueden descubrir la riqueza y la grandiosidad de este espacio que la capital hispalense ha tenido la fortuna de heredar. Una forma de acercarlos asimismo a Jesucristo, según apuntaba el delgado de medios del Cabildo Catedral, Marcelino Manzano. Y es que ante los ojos del espectador se levantan los cimientos del templo en la puerta de la Asunción, muro oeste de la Catedral, en el que en más de una vez el calvario que allí habita, cobra vida en un auténtico rompimiento de gloria.

Un trabajo que ha estado a cargo de Sebka Technology en coordinación con Profuse, que muestra en veinte minutos la evolución del templo desde la Isbilya almohade hasta nuestros días. Relatado en primera persona, «la Catedral» se basta de modelados 3D y recreaciones para mostrar los cambios que ha sufrido a los largo de estos ocho siglos.

No faltan apuntes sobre la reconquista de San Fernando, las aportaciones de Alfonso X el sabio o los daños ocasionados por los temblores del 24 de agosto de 1356. Así como su enorme papel en la religiosidad popular de la ciudad. Destaca especialmente la recreación, al son de la marcha Amarguras, del Monumento que se erigía en el lugar de proyección del mapping, de ahí esta localización, al que las hermandades de la Semana Santa solían peregrinar en sus estaciones de penitencia. Una estructura de 35 metros de alto, que custodiaba al Santísimo y estaba coronada por un Calvario, que vivió su última Semana Santa en 1960. Otra muestra del papel esencial que la Magna Hispalensis, representa en la devoción de los sevillanos.

Una vez el espectáculo ha concluido, se da paso a uno en vivo y en directo; la audición de varias piezas del organista de la Catedral, Pedro Luengo, en el coro. El broche de oro a esta experiencia, lo pone la visita al Altar Mayor, el más grande de la cristiandad, cuya majestuosidad, tal y como comentaban los asistentes a este primer pase, «es difícil de explicar en palabras». Eso sí, quedan materializadas en esta visita, las palabras del siglo XVI que se pueden escuchar durante la proyección: «quien no conoce Sevilla, no ha visto maravilla».

Las entradas para esta novedosa actividad, ya están disponibles en la página web de la Catedral, por un precio de 20 euros.