El rincón de...
Héctor Salgado: «El sueño afecta a la salud, es casi imposible perder peso sin dormir bien»
Fue uno más de los muchos ingenieros que devoró el desplome de Abengoa y se vio obligado a reinventarse como 'coach' a través de internet

Medita quince minutos diarios, se somete a duchas frías recién levantado, corre 30 kilómetros semanales, levanta hierro tres veces por semana, hace ayunos intermitentes y alimentación intuitiva moderada en carbohidratos y, sin embargo, sigue vivo. No es un 'coach' al uso. Su singularidad lo lleva ... a apostar por los cambios de hábitos y de conducta. Su método para abordar los seis pilates del fitness es: hábitos y rutina, sueño, nutrición e hidratación, entrenamiento de resistencia, mentalidad de crecimiento y amistad y felicidad. Nació en Triana, de padre ecuatoriano y madre inglesa. Vive a caballo entre Londres y Sevilla. Y lamenta la debacle que supuso para la ciudad y para la Escuela de Ingenieros, la quiebra de Abengoa. Elogia el edificio de Palmas Altas, ejemplo de sostenibilidad en Sevilla y lo que más le gusta de la ciudad es pasear por el Guadalquivir.
–Usted vio en Wembley en el 86 a los Stones actuando a tope. ¿Cuál es el secreto vital de Mick Jagger, un octogenario con marcha de 'teenager'?
–Haber desarrollado hábitos vitales para tener energía y deseos de seguir viviendo con ganas. En los últimos veinte años cuida su salud y la pone en primer plano.
–¿Tiene algún cliente del perfil de sus satánicas majestades?
–No, tan mayor no. Mi cliente más añejo cumple sesenta y cinco en días. El perfil habitual de mis clientes tiene cuarenta y cincuenta años. Mujeres inclusive.
–El caso es que usted es ingeniero, trabajaba en Abengoa, la volatilización de la empresa lo deja en la calle y decide reinventarse. ¿Por qué vio en el fitness una oportunidad de mercado?
–Porque con los desafíos actuales del trabajo, la incertidumbre y el estrés al que estamos sometidos, los mayores de cuarenta años suelen dejar la salud en un segundo plano.
-Pero tengo entendido que es objetor de dietas y que no cree en el brócolis con pollo, por ejemplo.
-(Risas) Es correcto. Las dietas estrictas no son llevaderas. Por eso las personas tienden a caer en el efecto yo-yo. Más que una dieta creo en comer de forma intuitiva y de manera sostenible, permitiéndose, de vez en cuando, darse un capricho.
-O sea, que tras su método de entrenamiento hay exigencia física, cambio de hábitos y propósito de enmienda vital, por decirlo de alguna forma.
-Yo diría más que enmienda vital, una mentalidad de crecimiento, es decir: ser un estudiante de por vida, querer aprender y querer mejorar tanto en el fitness como en la salud.
–En su argumentario hay frases que me gustaría que las explicara. Por ejemplo: la edad es un número.
–No debemos estar cohibidos por la edad, ya sean 50, 60 o más. Es sorprendente lo que se puede conseguir metidos en los 60.
–La comparación es el ladrón de la ilusión.
–Nuestras mentes están diseñadas para captar lo negativo antes que lo positivo. Tendemos a compararnos a otras personas que creemos lo hacen mejor que nosotros. La única comparación válida es conmigo mismo y mi antigua versión.
–Menos es más.
–En un plan de entrenamiento y de vida, hacer más no es siempre lo mejor. Por ejemplo: si saltamos o perdemos una sesión de entreno, no es necesario hacer doble sesión a la mínima oportunidad. La calidad siempre es mejor que la cantidad.
–Curiosamente, cuando nos confinaron a todos por la pandemia fue cuando su empresa experimentó un evidente crecimiento. ¿Sus clientes buscaban sólo quemar grasa o algo más?
–Buscaban algo más. En el sentido de conseguir hábitos que les permitiesen vivir de una forma más ordenada. Por ejemplo, mejorando el sueño y desarrollando buenos hábitos.
–Se dice que durante el confinamiento muchos aprendieron a hacer pasteles en sus casas. ¿Fue el caso de algunos de sus clientes?
–(Risas) Durante el confinamiento, por la necesidad de vivir de manera sedentaria, muchos clientes vieron un empeoramiento en su salud y estado físico. De ahí que durante el 2021 hasta la fecha me siguen llegando clientes.
–Tras la pandemia la situación cambia. Quiero decir que si teletrabajas, compras por Amazon y te engolfas con Netflix, apenas sales de casa. Ya no hay sólo un problema de peso, también de relaciones personales…
–Correcto. Por eso el último pilar que he añadido este año al método RRE (reacondicionamiento, recarga y energización) es amistad y felicidad, ya que se sabe que la amistad es tan poderosa como el sueño o el ejercicio.
–Lo veo a usted como un híbrido entre el Guru Majarachi y el maestro Miyagi, el coach de Kárate Kid.
–(Risas) Simplemente intento hacer algo que funcione para mis clientes.
–Siempre se ha dicho que un gordito es una persona feliz. En cambio, los sobrepesos llaman a su puerta frustrados u buscando ser felices. ¿Tiene usted el secreto para ser feliz?
–La felicidad está basada en el equilibrio de todas las áreas de nuestra vida: relaciones, salud y economía.
–Es usted contundente cuando me asegura que, si no duermes bien, no pierdes un kilo. ¿Por qué?
–El sueño afecta nuestro estado emocional, hormonal, energético y salud en general. Es casi imposible perder peso sin calidad de sueño.
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