Endesa repone por tercera vez un transformador de Las Vegas al que se enganchan las mafias de la marihuana

Por la mañana aterrizaban los técnicos de la compañía para iniciar los trabajos. El fuego había sido tan virulento que había destrozado hasta la caseta exterior que guarda los aparatos que dan suministro energético a las viviendas. En este caso, los trabajos de restauración han partido de cero. La inversión que va a realizar la compañía ronda los 200.000 euros; un dinero que puede quedar reducido a cenizas si se atiende a los precedentes.

Ese mismo centro de transformación, equipado con dos transformadores, tuvo que ser repuesto en noviembre de 2021 y en junio de 2022 después de haber sido pasto para las llamas por sendos fuegos con un mismo origen: la sobrecarga en la red. En ambas actuaciones, la compañía invirtió otros 200.000 euros. Desde la compañía aseguran que los equipos tienen capacidad para dar luz a más de 1.400 clientes. Pero en la zona sólo hay 33 usuarios con contrato en vigor. Las campañas llevadas a cabo para que los residentes en esta zona del Polígono Sur se den de alta y soliciten el bono social han fracasado.

También descartan que el origen de este fraude eléctrico con capacidad para volatilizar centros de transformación sea enganches para consumo doméstico de viviendas de familias sin recursos porque los equipos tendrían capacidad de respuesta incluso para resolver esa demanda fuera de la ley. La sobrecarga está relacionada con las plantaciones de marihuana que crecen con la ayuda de luz artificial y aparatos de ventilación que están conectados las 24 horas del día.

En la barriada de Martínez Montañés hay otros tres centros de transformación que han salido ardiendo en los dos últimos años. Sólo hay que mirar al cielo para ver en algunas de sus calles cómo los cables van de un bloque al de enfrente para repartir luz a través de enganches ilegales. Una grúa especial trasladó este miércoles la caseta del nuevo centro de transformación hasta Las Vegas. La instalación, que pesa unos 28.000 kilos, se quedó montada a la espera de que se coloquen este jueves los equipos eléctricos.

Esta semana la compañía arrojó el dato de que a la semana, los técnicos desconectan dos plantaciones de marihuana a la semana. Pero a través de un comunicado también se lamentaban de que el nivel de reincidencia en estas actividades es muy alto y tienen constatado cómo al poco de eliminar un enganche ilegal que abastece un cultivo, a las pocas horas las mafias ya están instalando nuevos invernaderos de cannabis.