Carlota Casiraghi, la embajadora de Chanel, en Sevilla

Pues bien Charlotte Marie Pomeline Casiraghi, como fue bautizada poco después de su nacimiento (el 3 de agosto de 1986), la segunda hija de Carolina de Mónaco y su malogrado marido, Stéfano Casiraghi, visita estos días Sevilla.

La joven, considerada un icono de la elegancia acude a la capital hispalense para recibir un premio, el que le otorga Vanity Fair, que ha decidido nombrarla «personaje del año 2023». Será una gala especial que tendrá lugar en el Real Alcázar de Sevilla esta noche y en la que, según la revista se reconocerá «su extraordinaria contribución a las artes y su labor en favor del empoderamiento de las mujeres a través de la literatura, la filosofía, la cinematografía y la filantropía».

A la cita están invitados además del alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, y el presidente de la Junta, Juanma Moreno Bonilla, conocidos personajes como Adriana Abascal; Nieves Álvarez; Boris Izaguirre; Laura Ponte; Garbiñe Muguruza; Eugenia Ortiz Domecq; Milena Busquets; Lucía Rivera; Mercedes Domecq; Xandra Falcó y otros muchos.

Este reconocimiento de Vanity Fair destaca la influencia global de Casiraghi como embajadora y portavoz de la casa Chanel, un papel en el que ha sido fundamental para la difusión de la cultura a través de iniciativas como la serie «Los encuentros literarios de la rue Cambon», en la que reúne a mujeres, escritoras y amigas de la casa con el objetivo de promover la emancipación y empoderamiento de las mujeres, tanto a través de obras originales como de importantes figuras literarias.

La llegada de la joven ha despertado gran expectación. Y es que hay que remontarse más de treinta años atrás para recordar la visita de un miembro de los Grimaldi. En la memoria está la visita de su abuelo Rainiero y su madre, Carolina, a la Expo 92 con motivo del día nacional del Mónaco. Hace más de 30 años de aquellas imágenes de una princesa que aún llevaba luto por la muerte de su difunto esposo pero que, ataviada con un traje oscuro, grandes gafas de sol y bolso Chanel, acaparó todos los flash y causó sensación cuando llegó casi casi con la misma edad que ahora tiene su hija. Hoy se espera a Carlota, que a sus 37 años se ha convertido casi un clon de su madre, y que ha heredado la elegancia y el charm de su abuela.