El barrio de San Jerónimo de Sevilla explota: «Ya no me atrevo a salir a la calle; tengo miedo»
Vecinos y hosteleros denuncian la falta de seguridad y harán una nueva manifestación
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Con media Sevilla perpleja aún por el ataque de los hackers al Ayuntamiento de Sevilla, existe un barrio en el distrito Norte, San Jerónimo, que vive atemorizado por la delincuencia de las calles «desde hace muchísimo», como afirman sus vecinos. Según sus propias palabras, en las últimas semanas no han parado de producirse todo tipo de robos en una situación «imposible de aguantar» y que les ha llevado a hacer varias concentraciones organizadas por la Asociación de Vecinos San Jerónimo.
«A mí casi me dejan en el sitio. Hace dos semanas me robaron mi cadena de oro con un tirón. Menos mal que se rompió la cadena, porque, si no, me ahogan. Llegó un chico por detrás, me tocó, me agarró, y me la arrancó. Esto no se puede permitir. Desde entonces no salgo a la calle. Tengo miedo. Tengo pesadillas. Creo que todos merecemos estar seguros, y aquí ya es imposible. Por favor, hagan algo en ABC», dijo Francisca Martínez, vecina del barrio y aturdida aún por la experiencia que le tocó vivir.
Uno de los representantes de la Asociación de Vecinos San Jerónimo Siglo XXI, David Díaz, apunta a un deterioro constante por la inseguridad manifiesta: «Nací en el barrio, me crie en el barrio y jamás he visto lo de ahora. Tengo 42 años y San Jerónimo ya no es lo que era por todos los atracos que estamos sufriendo. Ahora la zona en la que se están produciendo más atracos es cerca del Parque Campillo. La inseguridad ha ido creciendo poco a poco. Cuando yo era pequeño era un barrio seguro. Pero desde 2018, cuando llegaron los primeros incidentes, San Jerónimo cambió. La semana pasada hicimos una concentración para protestar. Este viernes haremos otra por la noche. Algo hay que hacer para que nos hagan caso»
Igualmente, los negocios se están viendo afectados por la inestabilidad. Daniel Labrador, dueño de la Cercevería El Puerto, hizo un relato en el mismo sentido: «El mal ambiente es evidente. La Cervecería está abierta desde el año 70, y claro que se nota el cambio, claro que se nota. Para la Policía no existimos. Los percances se repiten y no pasa nada. Un día tuve que llamar a la Policía porque había dos niñatos que no me querían pagar, y casi me agreden. Llamé a la Policía y me dijeron que no podían venir. Sentí mucha impotencia. Sólo aparecen y se dejan ver cuando somos noticia por asesinatos o algo así».
También Francisco Ortiz, presidente de la Asociación Ángeles de la Ciudad y guardián del cementerio de San Jorge, conocido popularmente como cementerio de los ingleses, mostró su indignación por los continuos actos de vandalismo que sufren en la zona: «Esto es un foco de inseguridad para el barrio. En agosto me encontré con un asaltante. No fue un episodio violento. Pero a mí no me pagan para soportar estas situaciones con tanta tensión. Este individuo, al verme, volvió a saltar el muro y se marchó. Pero qué hubiera pasado si me hubiera atacado. Son muchos los que han entrado en el cementerio. Es algo ya crónico. Se quieren llevar el material de obra que tenemos, las herramientas, lo que sea. Justo detrás del muro hay ya hasta una chabola. Viene y se va gente por la droga. Esto es un foco de venta. El escombrero lleno de basura da pena verlo. Ya no es sólo por la limpieza, sino también porque la inseguridad va en aumento. Aquí hay robos a cada momento».
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