¿Qué engorda más: el vino o la cerveza?
Aunque ambas contienen alcohol, son dos bebidas muy diferentes, tanto en beneficios como en la cantidad de calorías que contienen
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Si hay algo indiscutible en España, es que el vino y la cerveza son los reyes de las reuniones sociales. Tanto es así, que se estima que cada español toma una media de 52 litros de cerveza por año y unos 27,8 en el caso del vino y, a excepción del café y el té, pocas bebidas generan tanta división en la sociedad. Razón por la que no es de extrañar que sean dos de las bebidas alcohólicas que más se consumen en todo el mundo, incluso por encima de muchos refrescos. Pero, obviando las preferencias que tengamos cada uno, ¿cuál nos beneficia más a la hora de perder peso?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que, tanto la cerveza como el vino, son bebidas alcohólicas con unos efectos secundarios nocivos para el organismo, por lo que reducir su consumo, aunque este sea moderado, o directamente eliminarlo, siempre es una buena opción. No obstante, si no podemos evitarlas, los expertos en salud recomiendan no sobrepasar los 400 ml de vino tinto para un hombre y 300 ml para una mujer. En el caso de la cerveza, esa cantidad de alcohol se traduce en 700 ml para los hombres y 400 ml para las mujeres respectivamente.
Beneficios para la salud del vino y la cerveza
Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos escuchado que tomar una copa de vino al día puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, presión arterial y diabetes. Esto es así gracias a los «polifenoles«, un grupo de sustancias presentes en las plantas con una alta capacidad antioxidante que ayudan a combatir los radicales libres, reduciendo así el riesgo de padecer enfermedades neurológicas o cáncer. Además, el consumo moderado de vino ayuda a metabolizar el colesterol de forma más efectiva.
Por su parte, la cerveza es rica en vitaminas B1, B3 y B6, ácido fólico, magnesio y potasio. Además, según la Asociación Americana del Corazón, la fibra soluble que contiene puede ayudar a reducir el «colesterolmalo«. Asimismo, las cervezas con mucho lúpulo son ricas en fitoquímicos, un compuesto que ayuda a reducir el riesgo de desarrollar piedras en el riñón.
Por tanto, aunque el vino cuenta con una gran capacidad antioxidante y reduce el riesgo de varias enfermedades, no cuenta con la ventaja de la cerveza de aportar una gran cantidad proteínas y minerales, así que es menos relevante a nivel alimenticio.
¿Qué engorda más el vino o la cerveza?
Lo fundamental cuando queremos es perder peso, es ingerir menos calorías de las que gastamos para poder disminuir nuestro porcentaje de grasa corporal y así adelgazar.
Para ello existen dos opciones destacables:
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Reducir la cantidad de calorías que consumimos
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Aumentar nuestro gasto calórico a través del deporte
Respecto al aumento de peso por su ingesta, la creencia de que la cerveza engorda es errónea, el problema es que cuando se bebe, se consume más cantidad de líquido, pero existen pequeñas diferencia entre ambas bebidas, 100 ml de cerveza rondan las 50 calorías, 70 en el caso del vino.
Aunque esto pueda hacernos creer que la balanza se inclina a favor de la cerveza, es muy difícil que consumamos solamente 100 mililitros. Por tanto, si miramos las calorías de una copa de cerveza estas aumenta a 150 mientras que las de una copa de vino son unas 105 calorías.
Por último, cabe destacar que la cerveza sin alcohol sí es un buena aliada a la hora de adelgazar, ya que cuenta con muy pocas calorías y, además, no contiene alcohol, que es la sustancia que resulta nociva para nuestro organismo, aunque muchos todavía se resisten a consumirla.
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