El truco desconocido con el que dejarás de mojarte cuando friegues con guantes

Mantener la casa limpia suele ser una tarea diaria que toda persona hace en mayor o menor medida. Suele ser habitual que, por uso e higiene, la cocina y el cuarto de baño sean los lugares que más urge mantener en un estado de higiene.

En ellos se realizan actividades diarias que ensucian bastante, como cocinar, ducharse, utilizar el inodoro... Si estas estancias no se limpian habitualmente, se pueden desarrollar gérmenes y bacterias que afecten a nuestra salud de manera muy negativa. Por no mencionar que, a nivel estético, resulta desagradable que estos espacios estén sucios.

Pero en general, una persona tiene muchos más quehaceres en su día a día, algunos ocupando la mayor parte del tiempo como trabajar. Por ello, cuando hay tiempo para limpiar, se pretende hacer de la manera más rápida, cómoda y efectiva posible.

Algunas de esas tareas son sencillas, como pasar una bayeta o barrer el suelo, pero también las hay más complejas o al menos, a las que hay que dedicarle algo más de tiempo y atención.

Nos referimos, por ejemplo, a limpiar una vitrocerámica, un fregadero, un taza del váter o una ducha. En estas labores del hogar se necesitan varios elementos, como estropajos y productos químicos como la lejía o el desengrasante, además de guantes para proteger las manos de éstos.

Utilizar guantes viene muy bien como protección, pero a veces pueden resultar un poco incómodos y, al hacer ciertos movimientos, el agua se escurre por ellos y se cuela entre el guante y nuestro brazo o sigue bajando por él.

Pero eso se puede evitar. ¿Cómo? Gracias a un vídeo que ha compartido la usuaria de Instagram @organizando.asesoria. En él da un truco de lo más sencillo pero efectivo, y que seguro que muchos no habían pensado. Puedes verlo a continuación

Como has podido comprobar, basta con un simple movimiento para conseguir que el agua no chorree por tu piel. Tan solo deberás dar la vuelta al filo del guante, en dirección a la mano, quedando así una especie de surco donde quedará el agua que pueda caer desde los dedos o la palma.

De esta manera evitarás la indeseada sensación de mojarte el brazo o la ropa, en caso de llevar manga larga, y limpiar con guantes se volverá una tarea un poco más agradable.