Una española que vive en Australia, en shock con las escobas y fregonas en este país: «Parezco el Ratoncito Pérez»

Pocas cosas hay más imprescindibles en toda casa que una escoba y una fregona. Tener una vivienda limpia es básica y garantía de que no habrá problemas de salubridad, algo que es lógico pero que no está de más recordar. De aquí a que trapos, productos de droguería así como estas herramientas de limpieza estén en todos los inmuebles, incluso desde el día de su estreno, cuando no hay ni un solo mueble pero ya hace falta adecentar las estancias.

Teniendo en cuenta esta realidad resulta chocante que uno pueda llegar a alucinar con estos productos y esto es lo que le ha ocurrido a Marta, una española que está afincada en Australia y cuya cuenta de TikTok (@martaregistrada) tiene ya casi 67.000 seguidores. Sus experiencias y anécdotas en el país de Oceanía, en el que lleva tiempo viviendo y trabajando, junto a su pasión por viajar, suelen conseguir muchas visitas.

En este sentido, Marta ha estado ocho meses viviendo en una furgoneta tipo van y ahora parece que ha decidido, como ella misma contaba recientemente, pasar a a vivir en un piso y compartir habitación. Puede que raíz de estos cambios haya empezado a necesitar la escoba y fregona y la joven ha aprovechado la ocasión para hablar de ellos, puesto que son un tanto diferentes a las que conocemos en España. Su publicación, colgada hace casi un mes en TikTok, acumula 431.000 visualizaciones desde entonces.

«Barrer en Australia: una labor reservada para personas entre 5-10 años», escribe junto al post. Marta empieza el vídeo recordando que hace un tiempo hizo un post en el que comentaba el peculiar cubo para la fregona que se usa en el país y rememora que se trata «un tremendo armatoste que el simplemente el cubo 'by itself' ya pesa 5 kilos». «Si lo llenas de agua ya es una tarea al alcance de muy poquitas personas, requiere verdadera fuerza, no la fuerza de voluntad de levantarte y ponerte a fregar», explica.

Tras ello, la joven se pone a abordar la otra cuestión. «Una vez ya tenían la fregona dijeron: un momento, no puede ser que una labor tan diaria, tan común, tan doméstica solo la pueda hacer una persona que tenga unos bíceps importantes». Y, con el tono irónico, prosigue con la idea de hacer «una escoba que pueda usar todo el mundo: ligera, fácil, que la llevas a un sitio, a otro...», detalla antes de que entre en pantalla una escoba típica australiana.

«Aquí a lo mejor no estáis viendo lo ridícula que es», apunta antes de ponérsela al lado para que quede constancia de lo pequeña que es esa «escobita», que le llega a la altura de la cintura y eso que ella mide solo 1,63. «La cosa se puede poner más ridícula, que es cuando está en movimiento», avisa Marta, que se pone a usarla mientras resalta que «parezco el Ratoncito Pérez barriendo su casa».

A partir de aquí, la joven afincada en Australia remarca que la escoba parece para limpiar migajas de una mesa y que no sirve «ni para jugar». «Barrer barrer no barre mucho pero cuándo fue ese el fin de de una escoba», añade con su estilo irónico que a tantos seguidores ha cautivado. Finalmente, Marta comenta que con estas dimensiones pretendían hacer que las tareas de casa «fueran superinclusivas» pero no le ve sentido. «Tenemos la fregona para 1,80 plus y la escoba para un 1,60 menos», reitera, antes de acabar la publicación lamentando que «recoger no recoge nada pero toda ella queda super recogida».