Name: Turrón de coco casero. Receta fácil y deliciosa para Navidad
Total time: 30 min
Yield: 7
Cuisine: Española
Ingredients: 300 g. de coco rallado; 200 ml. de leche condensada; 50 g. de azúcar glas; 1 cucharadita de esencia de vainilla; 100 g. de chocolate blanco (opcional, para decorar); 1 cucharada de mantequilla (para engrasar el molde)

Para 7 1.20€/pers. 180kcal/100g

Ingredientes

300 g. de coco rallado
200 ml. de leche condensada
50 g. de azúcar glas
1 cucharadita de esencia de vainilla
100 g. de chocolate blanco (opcional, para decorar)
1 cucharada de mantequilla (para engrasar el molde)

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El turrón de coco es una de esas recetas que, sin ser demasiado complicada, conquista el paladar desde el primer bocado. Suave, dulce y con ese toque tropical que solo el coco puede aportar, este turrón se ha convertido en un favorito en las mesas navideñas. Aunque muchas veces optamos por comprar los turrones ya hechos, nosotros te explicamos cómo hacer turrón casero.

La mezcla de coco rallado con leche condensada crea una textura compacta pero jugosa, que se deshace en la boca. El toque de vainilla y la posibilidad de añadir chocolate hacen que esta receta sea tan versátil como deliciosa. Ideal para quienes quieren salir un poco de los sabores tradicionales del turrón de almendra o turrón de chocolate, esta versión de coco aporta un soplo de aire fresco a la repostería navideña.

Si eres amante del coco, seguro que te encantará descubrir otras recetas similares. Por ejemplo, el arroz con leche de coco y mango es perfecto para un capricho rápido y fácil. También puedes disfrutar de un flan de coco, ideal para un postre diferente, o atreverte con unas cocadas, coquitos, besitos o pastelitos de coco, que harán las delicias de todos.

Receta turrón de coco

Turrón de coco casero. Receta fácil y deliciosa para Navidad

Elaboración paso a paso

Antes de empezar, reunimos todos los ingredientes en la mesa para asegurarnos de que no nos falta nada. Este paso, aunque parece obvio, nos ahorrará tiempo y posibles olvidos. Engrasamos un molde rectangular con mantequilla o lo forramos con papel vegetal para facilitar el desmolde. Esto es crucial para que el turrón salga perfecto y no se quede pegado al molde.
En un bol grande, vertemos el coco rallado y añadimos la leche condensada poco a poco. Este paso es esencial para que el coco absorba la leche de manera uniforme, formando una masa homogénea. Si lo prefieres, puedes usar tus manos (limpias, por supuesto) para mezclar mejor y sentir la textura de la masa.

Incorporamos el azúcar glas, tamizándolo previamente para evitar grumos, y la esencia de vainilla, que aportará un aroma delicioso. Este toque aromático es lo que diferencia a un turrón bueno de uno excelente, así que no lo omitas. Mezclamos bien hasta que todos los ingredientes estén perfectamente integrados.
Vertemos la mezcla en el molde preparado. Con una espátula o las manos ligeramente humedecidas, presionamos la masa para que quede bien compacta y nivelada. Este paso es importante para que el turrón tenga una textura firme y no se deshaga al cortarlo.
Cubrimos el molde con papel film y lo llevamos a la nevera. Dejamos reposar al menos 4 horas, pero si tienes tiempo, es mejor dejarlo toda la noche. Este tiempo de reposo permite que los sabores se integren y que la masa adquiera la consistencia perfecta para ser desmoldada.
Sacamos el molde de la nevera y desmoldamos el turrón con cuidado. Si hemos utilizado papel vegetal, este paso será mucho más sencillo. Asegúrate de hacerlo con paciencia para no romper el turrón.
Si quieres darle un toque especial, fundimos el chocolate blanco al baño maría o en el microondas en intervalos cortos para evitar que se queme. Vertemos el chocolate sobre el turrón y lo extendemos con una espátula. Dejamos que el chocolate se endurezca antes de servirlo.

Consejos para un turrón de coco perfecto

Si quieres un turrón menos dulce, puedes reducir ligeramente la cantidad de leche condensada y añadir un poco más de coco rallado. Para darle un toque extra de sabor, pruebe a agregar ralladura de limón o naranja a la mezcla. Esto aporta un contraste cítrico que equilibra perfectamente la dulzura del coco.
Si buscas una versión más jugosa y sofisticada, añade unas gotas de ron o licor de coco a la mezcla. Esto no solo realzará el sabor, sino que también le dará un toque más adulto y festivo. Otra opción es incorporar trocitos de frutos secos, como almendras o pistachos, para un acabado crujiente y lleno de matices.
El turrón de coco es una receta que admite muchas personalizaciones. Si eres fan del chocolate, cubre todo el turrón con una capa de chocolate negro o con leche en lugar de blanco. El contraste entre el sabor intenso del chocolate y la suavidad del coco es simplemente espectacular. También puedes agregar trocitos de fruta confitada a la mezcla para darle un toque colorido y divertido.
En muchas culturas tropicales, el coco simboliza la protección y la abundancia. Por esta razón, incluirlo en las mesas navideñas no solo es un acierto gastronómico, sino también un gesto lleno de significado. En países como Filipinas o Brasil, los postres de coco son imprescindibles durante las celebraciones, lo que demuestra su importancia cultural y culinaria.
Preparar un turrón de coco casero no solo es fácil, sino también una manera perfecta de darle un toque personal a tus fiestas navideñas. Su sabor exótico y su textura suave lo convierten en un dulce que gusta a todos, desde los más pequeños hasta los adultos más exigentes. Además, al hacerlo en casa, puedes adaptarlo a tus preferencias, experimentando con sabores y decoraciones. Así que no lo pienses más: ponte el delantal, reúne los ingredientes y sorprende a tus seres queridos con este delicioso turrón. ¡Será un éxito rotundo!

Hemos trabajado 2 horas y 20 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

30 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.