Para 4 1.2€/pers. 208kcal/100g
Ingredientes
- 1 kg. de sardinas frescas (aproximadamente 12 unidades)
- 1 kg. de patatas gallegas (tamaño mediano)
- Sal (para la cocción de las patatas)
- Para la limpieza del horno: agua y limón
- 1 Kg de sal extragorda, especial pescados a la sal (si las vais a preparar con la 2º opción). Sería muy parecido a la lubina a la sal
Este pescado azul es un regalo de los mares, un auténtico manjar que podemos llevar a nuestra mesa por un precio muy económico (excepto en San Juan).
Nos dará unas recetas con pescado deliciosas y muy saludables. Todos los años, nos acordamos de ellas por fechas de San Juan, la noche mágica de la llegada del verano, pero su temporada de pesca dura varios meses. De mayo hasta octubre podemos encontrarlas frescas en todas vuestras pescaderías de confianza.
Durante la temporada de la sardina fresca, es muy apetecible preparar unas sardinas asadas o a la parrilla, aunque muchas veces no lo hacemos por el temor a que se nos llene la casa del olor que desprenden al cocinarlas.
Por ello, hoy voy a daros algunos trucos para que podáis prepararlas en el horno de casa sin que desprendan mucho olor y vivamos con él durante varios días. Para acompañar las sardinas asadas he decidido cocer unos ‘cachelos’ gallegos, es decir, cocer unas patatas sin quitarles la monda.
Preparación de las sardinas asadas
- El éxito de la receta comienza ya en la pescadería a la hora de comprarlas. Escogeremos sardinas bien frescas y brillantes, con su característico color plata.
- Los ojos no deben de estar hundidos ni con tonos amarillentos, y no deben de desprender un olor fuerte, síntoma de que ya llevan varios días desde su llegada al punto de venta.
- Las sardinas tendrán un mejor sabor si las cocinamos enteras, sin eviscerar, igual que se hacen a la parrilla o al espeto. A la hora de comerlas, la parte de la tripa se retira sin dificultad, no os preocupéis por ello.
- Asar sardinas es relativamente sencillo y en cuestión de 20 minutos las tendremos en su punto, sin más ingredientes que un poco de sal gorda.
- Comenzamos por precalentar el horno. Lo ponemos en ‘calor total’ a 220º C, para que vaya cogiendo una buena temperatura.
- Como os he puesto en los ingredientes, utilizaremos patatas de tamaño mediano, para que estén cocidas en 20 minutos y podamos degustarlas al mismo tiempo que sacamos las sardinas del horno.
- En una cazuela grande con agua y sal, llevamos a ebullición y añadimos las patatas enteras y con piel. Dependiendo del tipo de patata y del tipo de olla, estarán listas en más o menos tiempo.
- El tiempo estimado sería entre 15-20 minutos. Lo mejor es ir pinchándolas con un tenedor o pincho, para comprobar si están cocidas por completo. Cuando estén listas, las escurrimos y reservamos en una fuente.
Asar las sardinas. Presentación final de las sardinas asadas
- Mientras se cuecen las patatas, vamos a asar las sardinas. Para evitar los olores os voy a recomendar un par de trucos, que a mí me funcionan, pero tampoco son totalmente infalibles. Ayudan y mucho para reducir el olor, pero no al 100 por cien, que quede claro.
- Directamente en la bandeja del horno, esparcimos una buena cantidad de sal extragorda (especial para pescados a la sal, no sal gorda) uniformemente en toda la superficie. Esta base de sal será de gran ayuda para reducir los olores del asado de las sardinas. Colocamos encima las sardinas y les añadimos el resto de sal por encima.
- Introducimos la bandeja en la parte central del horno, bajamos la temperatura a 200º C y horneamos 15 minutos en total.
- Terminado el tiempo de horneado, retiramos el pescado y le quitamos la capa de sal cuanto antes, para que no siga haciéndose. Debemos retirar la costra de sal para evitar que las sardinas sigan cocinándose en su interior. Con la ayuda de un cuchillo la retiraremos fácilmente. Comprobaréis como la piel del pescado sale con mucha facilidad.
- Pasamos las sardinas a una fuente para servir en la mesa. A la hora de degustarla, comprobaréis que la piel sale muy fácilmente. Servimos bien calentitas junto a los ‘cachelos’. Para recordar los momentos de las buenas sardinadas al aire libre, también las he comido con una rebanada de un buen pan de Galicia.
Consejos para unas sardinas asadas de rechupete
- Allí lo típico es comerlas sobre una rebanada de pan de brona o broa (con algo de harina de maíz), pero a falta de él he usado el excelente Pan de Cea, de mi tierra ourensana. Es un pan artesano de gran calidad, del que ya me habéis visto hablar en muchas ocasiones.
- Si una vez retiradas las sardinas del horno si aún apreciáis olor en la cocina, otro truco que podéis usar es echar un vaso de agua sobre la bandeja del horno. También debéis añadir unos trozos de limón exprimidos con el zumo en el agua y los trozos en la misma. Con el calor residual, el agua se evaporará y contrarrestará el olor de las sardinas asadas.
- Es un pescado que se agrupa en grandes bancos, con miles de ejemplares. Su hábitat se enmarca en el Atlántico, desde Senegal hasta Noruega, y en el Mediterráneo, en zonas de aguas cálidas.
- En España tenemos la suerte de que se pueden pescar en toda nuestra zona litoral. Su excelente sabor viene dado por su alimento, que va desde el pequeño plancton hasta peces de menor tamaño y crustáceos.
Hemos trabajado 2 horas y 35 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
45 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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Me gustan las recetas que públicas son fáciles de preparar y no son caras.
tambien si se les corta la cola a las sardinas no huelen
Alfonso! Es una pena que estemos en diciembre, pero aun así en Pamplona aún encontramos sardinas.
No tardaré ni una semana en probarlas. Me ha gustado la forma de hacerlas. Gracias por los trucos.
Un saludo
Muchas gracias por la receta, me encantan las sardinas.
me fascinan las sardinas q divinas
Hola Alfonso, hay otro truco para el olor y es ponerles en la cabeza de la sardina un grano de café, funciona.
En la receta de las sardinas, si el horno le ponemos el calor arriba/abajo vale lo mismo?. Así no tendremos que darle la vuelta.
Manuel, sí, siempre que lo hagas en rejilla. Sino tendrás que darle la vuelta.
Alfonso, las sardinas estaban buenísimas pero el truqui de la sal no ha funcionado mucho, la cocina se perfuma como si fuese San Juán… jajajaja. Seguramente reduce un poco el tema del olor pero no lo quita. Gracias de todas formas, la receta muy buena, como todas las que he preparado.
Yo creo que el mejor truco es cortándoles la colita a mi me funciona. Gracias Alfonso por tus recetas de la tierra. Un saludo.
muchas de las resetas tienen unos nombres que no conocemos aqui en america , no por que seamos tarados pero es que aqui no se usan, por favor traten de explicar un poco, sus resetas son magnificas , viva espana.
Otro buen truco para evitar el olor , es una vez preparadas éstas para meter al horno ponerles por encima algunas hojas de laurel, como unas diez no dan sabor pero sí evitan el olor, aunque si todos los olores de la casa fueran como éstos haría un ambientador. Buen provecho