Para 6 0.6€/pers. 247kcal/100g
Ingredientes
- 850 g. de tomate natural triturado
- 150 g. de tomate concentrado
- 2 dientes de ajo
- 100 ml. de aceite de oliva virgen extra
- 1 cebolla
- 1 manojo de orégano fresco (si no lo encontráis podéis sustituirlo por una cucharadita de orégano seco)
- Sal (al gusto de cada casa)
- 1 cucharadita tipo postre de azúcar (opcional)
- 6 hojas de albahaca fresca
Probablemente hayamos oído hablar de esta salsa y nos resulte bastante conocida, pero no nos confundamos, no es la misma que podemos ver en los mejillones a la marinera.
Para que la salsa marinara nos quede perfecta, necesitaremos utilizar un tipo específico de tomate llamado San Marzano. Si bien es cierto que, si utilizamos tomate triturado (mejor de tomate pera) o cualquier otro que nos venga a la cabeza, también nos saldrá increíble. El sabor cambiará un poco debido a que esta variedad de tomate concreta posee un equilibrio entre dulzor y acidez perfecto, pero no te preocupes, que el resultado será considerablemente similar.
Por otro lado, cabe destacar que, si utilizamos tomate natural, conseguiremos un resultado mucho más casero y delicioso, aunque la forma más cómoda es emplear tomate triturado natural. Te recomendamos buscar tomate ya triturado de la variedad mencionada. Esta salsa es ideal para el acompañamiento de todo tipo de pastas, pizzas o incluso como base de otras muchas elaboraciones, como carne o pescados. Una salsa de tomate que será tu aliada en la cocina.
Elaboración de la salsa Marinara o Pomodoro básica
- Comenzaremos por preparar nuestros ingredientes, para lo cual necesitaremos picar los dientes de ajo, las hojas de orégano y la cebolla. En el caso de que no tengamos orégano fresco, podemos utilizar sin problema orégano seco. En una cacerola agregaremos el aceite de oliva virgen extra y sofreiremos el ajo. A continuación, agregaremos también la cebolla con el fin de que se poche (unos minutos a fuego medio).
- El siguiente paso será agregar el tomate triturado natural, junto con el orégano y el tomate concentrado. Dejamos que se cocine a fuego bajo durante 1 hora aproximadamente. Removemos a menudo de forma que no se pegue. La idea es que se evapore el agua que sobra del tomate y así tome la consistencia de una salsa espesa y con mucho sabor.
- Cuando ya se haya cocinado todo, será el momento de añadir sal, al gusto de vuestra casa. También podemos agregar una cucharadita tipo postre de azúcar de manera opcional si vemos que está demasiado ácida la salsa. Seguidamente trocearemos la albahaca y la añadiremos removiendo bien. Ahora cocinaremos todo junto durante 10 minutos más de forma que todos los sabores se integren a la perfección.
- Para conservar nuestra salsa, solo necesitaremos un bote hermético o un bol que taparemos con plástico film. Aguantará en perfecto estado unos días. Y ya habremos terminado. puedes agregarla a cualquier elaboración que se te ocurra. ¡Qué aproveche!
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