Fácil 
20 min 
Por Alfonso López Alonso
Para 6
1.10€/pers.
224kcal/100g
Ingredientes
- 1 kg. de tomates maduros
- 300 g. de remolacha
- 200 g. de pan
- 250 ml. de aceite de oliva
- 1 diente de ajo
- Sal al gusto
- Un chorro de vinagre
- 1 manzana
- Anchoas
- 1 chorrito de zumo de limón
Hoy os traemos una receta especial para el verano, ya que es ideal para combatir el calor sin la necesidad de estar demasiado tiempo delante de los fogones. Además se trata de un clásico y es que el salmorejo, conocido por todos es una elaboración que tiende a gustar a todo el mundo, consumiéndose litros y litros durante el verano. En nuestro caso, hemos decidido llevar el salmorejo a otro nivel, elaborando así uno a partir de remolacha.
Nos libramos del calor propio de las sopas y las cremas frías son la mejor opción, como es el caso del salmorejo. Para aumentar nuestro recetario, la variedad es esencial, por eso y como descubrimiento, hemos decidido prepara un salmorejo de remolacha que resultará tan delicioso como el original y cuyo sabor tiene un punto dulce que enamorará a todo el mundo.
Asimismo, la guarnición, aunque os va a sorprender enormemente, probablemente sea la mejor combinación para este salmorejo. Utilizaremos manzana y anchoas para darle otro tope más personal. ¡Vamos con ella!
Receta de salmorejo de remolacha
Elaboración paso a paso
- El primer paso para elaborar este delicioso salmorejo será preparar la remolacha.
- Para ello, la lavaremos a conciencia debajo del grifo, de forma que retiremos todos los restos de tierra que pueda traer.
- Seguidamente, cortaremos el tallo a una distancia de 10 centímetros de la base utilizando un cuchillo bien afilado. Debemos dejar 10 centímetros sin cortar y así el color que caracteriza a la remolacha no se perderá mientras la cocemos.
- Ponemos a calentar en una olla, agua con sal.
- Cuando comience a hervir, agregamos la remolacha sin necesidad de pelarla.
- Dejamos cocer durante una hora. Comprobaremos si está tierna pinchándola con un cuchillo.
- Transcurrido este tiempo, retiraremos la remolacha del agua y la colocaremos en un escurridor.
- Debemos dejar que se enfríe para después pelarla utilizando un cuchillo afilado.
- Troceamos con cuidado y reservamos para después.
- Ahora lavaremos los tomates. Los cortamos en trozos no muy grandes, pero tampoco muy pequeños.
- Incorporamos los tomates troceados junto con la remolacha, el ajo, un poco de aceite, la sal y el pan en el vaso de la batidora.
- A continuación, dejaremos que el pan se ablande durante varios minutos. De esta forma, será mucho más sencillo trabajarlo.
- Trituramos la mezcla en la batidora hasta que se forme una mezcla.
- Añadimos el resto del aceite de oliva en un hilo al mismo tiempo que batimos a baja velocidad. De esta forma emulsionará como ocurre con la mayonesa, con una consistencia muy cremosa.
- Cuando tengamos la textura que estamos buscando, debemos pasar el salmorejo por un pasapurés. Así lograremos que las pieles o pepitas que puedan quedar se eliminarán y la textura será aun más fina.
- Agregamos el chorrito de vinagre y corregimos el punto de sal.
- Introducimos el salmorejo en el frigorífico hasta el momento en el que vayamos a consumirlo.
- Para servirlo, debemos cortar en pequeños dados la manzana y los colocamos encima del salmorejo.
- Rociamos el zumo de limón para que no se nos oxide y después agregamos unas cuantas anchoas y un chorrito de aceite de oliva.
Consejos para un salmorejo de remolacha perfecto
- En el caso de que nos haya quedado muy espeso, la mejor forma de aligerarlo es agregar un poco de agua. Aún así, cabe mencionar que este tipo de cremas son espesitas y no debe ser tan ligera como el gazpacho.
- Si el acompañamiento que te propinemos no te encanta, puedes servirlo tal y como se hace con el salmorejo tradicional, con huevo cocido y jamón, que también combinan a la perfección.
Hemos trabajado 2 horas y 10 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
20 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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