En la variada despensa de la gastronomía española, el calabacín tiene un lugar destacado. Esta hortaliza verde brillante ha sido durante mucho tiempo una joya oculta que añade sabor, textura y color a muchos de nuestros platos más queridos, desde una tortilla de calabacín hasta un saludable pisto manchego.
La magia del calabacín radica en su versatilidad, pudiendo adaptarse tanto a recetas tradicionales como a propuestas de vanguardia. Su textura suave y su sabor ligeramente dulce y terroso permiten combinarlo con una amplia variedad de ingredientes, transformando platos cotidianos en deliciosas experiencias. Ya sea crudo, asado, relleno o en cremas, el calabacín puede ser el protagonista o el perfecto secundario, demostrando que es un verdadero todoterreno de nuestra cocina.
Recetas con calabacín fáciles
Os dejamos 10 recetas sencillas pero deliciosas que tienen al calabacín como protagonista, ideales si buscáis incorporar este nutritivo ingrediente en vuestro menú diario.
Calabacines rellenos de carne picada
Unos calabacines rellenos de carne con una suave bechamel y gratinados al horno con queso. No hace falta que diga que nos encontramos ante una combinación deliciosa. La potencia de su relleno y gratinado contrasta con la suavidad del calabacín recién horneado. Además es una receta que admite múltiples variaciones y podéis tunearla con vuestros rellenos preferidos.
Calabacines rellenos de arroz y atún
Una receta para una comida o cena sana, equilibrada y sobre todo sabrosa, para que se la coman en casa sin rechistar grandes y pequeños, incluso para que pidan repetir ración. Un plato lleno de sabores y texturas, un bocado de rechupete.
Crema de calabacín
Una crema suave y ligera, que podemos acompañar de picatostes de pan crujientes, jamón salteado o darle el toque personal que más os guste. Una opción más para comer sano en casa en cualquier momento del año.
Puré de calabacín y puerros
Los ingredientes principales de esta receta son el puerro y el calabacín, ambos con mínimo aporte calórico y, en el caso del calabacín, casi un 95% de agua. Esto hace que se trate de un plato súper ligero y bajo en calorías, pero sin restar para nada un gran sabor y textura.
Pisto de calabacín
El pisto de calabacín es un plato tradicional de la cocina española hecho con tomate, pimiento, cebolla y calabacín, aunque puede hacerse con cualquier verdura de la huerta. Una receta vegetariana que se suele consumir en verano, cuando el calabacín esta en su apogeo, en plena temporada.
Lasaña de calabacín
El calabacín nos ofrece una versión más ligera de muchos platos tradicionalmente más calóricos. Sustituir la pasta por fideos de calabacín o, como en este caso, sustituir las láminas de una lasaña por láminas finas de calabacín, son fantásticos ejemplos de lo mucho y bueno que no ofrecen esta hortaliza.
Espaguetis de calabacín
Una receta vegetariana que podéis cambiar al gusto de casa, otra receta para triunfar entre los más peques y por supuesto, los mayores.
Buñuelos de calabacín
Este plato va perfecto para un aperitivo, una comida o cena de picoteo o para llevarnos al trabajo o de picnic. Y para darles algo de chispa, se acompañan de la típica salsa de yogur o la salsa griega Tzatziki. La verdad es que están deliciosos y es un no parar de comerlos. ¡Están de rechupete!
Croquetas de calabacín y queso
Una receta de croquetas con un relleno de verduras que es pura gloria. Aprovechando las verduras que tenemos todos en la nevera.
Pizza con calabacín
Una de las pizzas que más triunfa en casa es la que preparamos con verduras de temporada. En este caso mezclando el sabor dulce del pimiento rojo y la cebolla, con la intensidad de la berenjena y el calabacín.
Scarpaccia italiana. Tarta de calabacín facilísima
En el sur de la Toscana italiana, más concretamente en Versilia, se prepara un pastel de calabacín llamado scarpaccia que nos ha enamorado. Es diferente, original, jugoso y muy fácil de hacer. Lo tiene todo y, cuando la pruebes, vas a querer repetir. Se trata de una elaboración ideal para una comida o cena de picoteo con la que sorprender a tu familia o invitados.
Rollitos de calabacín rellenos de verduras y queso
Es una receta con calabacín que admite múltiples variaciones y podéis tunearla con vuestros rellenos preferidos: salmón, atún, bacalao, pollo, jamón, beicon, otras verduras y mucho más. En vuestra imaginación -y en lo que tengáis en la nevera- está el límite. En este caso hemos optado por brócoli, pimiento y una mezcla de requesón y queso de Cabra, a tope de sabor.
¿Cuál es la mejor manera de comer el calabacín?
El calabacín es tan versátil que acepta todas las técnicas de cocinado. Algunas de las mejores formas para comer el calabacín son:
- Si tenéis un calabacín pequeño y tierno, consumirlo en crudo es una opción ideal. Así disfrutamos de su textura crujiente y su sabor fresco y ligeramente dulce, especialmente en ensaladas o con un ligero golpe de vapor. Una vinagreta bien equilibrada o un aderezo de yogur pueden ser el toque perfecto para resaltar su sutil sabor.
- El calabacín es una excelente elección para preparar cremas y purés. Su textura suave se deshace con facilidad al cocinarlo, convirtiéndose en la base perfecta para una crema suave y aterciopelada. Ya sea solo o acompañado de otros ingredientes como la patata o el puerro, un puré de calabacín es una opción reconfortante y nutritiva para una cena ligera.
- Con un horno y unos buenos calabacines podemos hacer maravillas. Al hornearlo, los azúcares naturales del calabacín se caramelizan, intensificando su sabor y dándole un toque tostado que puede añadir un extra a cualquier plato. Ya sea en una lasaña de verduras, en rodajas con un poco de aceite de oliva y hierbas, o relleno con tu mezcla favorita, el calabacín horneado es sin duda una delicia que debes probar.
- Y no podemos olvidarnos de una de las formas más sencillas y populares de cocinar el calabacín: a la plancha o a la brasa. Un poco de aceite de oliva, sal y pimienta son suficientes para realzar su sabor natural. Esta opción es perfecta para una guarnición sencilla pero sabrosa o como parte de una brocheta de verduras a la brasa. Cocinar el calabacín de esta manera es una forma rápida y deliciosa de disfrutarlo.
¿Qué beneficios tiene el calabacín para la salud?
El calabacín destaca por su alto contenido en agua, lo que lo hace especialmente hidratante, además de ser bajo en calorías. Es fuente de fibra, imprescindible para un correcto tránsito intestinal, y aporta una buena dosis de vitaminas, como la vitamina C, la vitamina A y las del complejo B, además de minerales como el potasio, el magnesio y el fósforo.
Comer calabacín no solo es una delicia para el paladar, sino también un acto de cuidado hacia nuestra salud:
- Su elevado contenido en antioxidantes ayuda a combatir los radicales libres, protegiendo nuestro cuerpo del envejecimiento prematuro y de ciertas enfermedades.
- Su aporte de fibra favorece la sensación de saciedad, ayudando en dietas de control de peso.
- La vitamina C presente en el calabacín refuerza nuestro sistema inmunológico, y los minerales que contiene contribuyen a la salud de nuestro sistema nervioso y cardiovascular.
Sin duda, incorporar el calabacín a nuestra dieta es una forma sabrosa de cuidar nuestra salud.
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Probare de hacer las cremas y el pisto. Me parece que quedaran muy ricas. Gracias.
Me tienen enganchada soi una fan de las recetas. Tengo infinidad de recetas las colecciono.estas me parecen estupendas.