Quarkinis o buñuelos de queso crema. Un dulce de Carnaval

Quarkinis o buñuelos de queso crema. Un dulce de Carnaval

Icono personas Para 10Icono euro 0.25€/pers.Icono calorias 408kcal/100g

Ingredientes

  • 4 huevos
  • 200 g. de queso quark o queso crema
  • 10 g. de azúcar vainillado
  • 50 g. azúcar blanquilla
  • 30 ml. agua
  • 250 g. harina de trigo de todo uso
  • 10 g. de levadura química
  • Un pellizco de sal
  • Aceite de girasol en abundancia, para freír
  • Canela molida
Ir al paso a paso ↓

Aquí tenéis una receta que os va a encantar, por su simplicidad y por lo riquísimos que están, unos quarkinis o buñuelos de queso crema. Se trata de un dulce de Carnaval propio de la cultura germana, aunque no hay que esperar a que llegue esa época del año para preparar estas delicias que son perfectas para desayunar o merendar.

El nombre más tradicional de estos dulces es Quarkbällchen, pequeñas bolitas de masa tierna y esponjosa que a mí me han recordado mucho a los donuts solo que son infinitamente más rápidas y sencillas de elaborar. La masa no requiere de levados ni reposos. Para prepararla tan solo hay que batir todos los ingredientes en un bol y ya está lista para freír, al igual que ocurre con las tortitas.

Quizás lo más complicado de esta receta sea conseguir bolas perfectas, sobre todo si no tenemos mucha práctica, pero en el fondo importa poco porque salen igual de ricos. Si tenéis niños, seguro que les encanta participar de su elaboración y aún más de su degustación. Y si queréis echar la casa por la ventana, y mandar la dieta a paseo, podéis acompañar los buñuelos con un chocolate caliente… ¡No podréis resistiros a la tentación! Dicho todo esto, poneos el delantal y manos a la obra que estos buñuelos están de rechupete.

Receta quarkinis o buñuelos de queso crema

Elaboración de la pasa

  1. Si el queso viene con mucho suero, lo primero que hay que hacer es escurrir sobre un colador con papel absorbente o una estameña para que no afecte a la textura final de la masa. Si no es el caso, nos saltamos este paso.
  2. En un recipiente amplio y hondo preparamos la masa. Introducimos los huevos, a temperatura ambiente, y agregamos el azúcar vainillado, el azúcar y el agua.
  3. Usamos unas varillas eléctricas para batir los ingredientes, incorporar aire y obtener una masa cremosa y blanquecina.
  4. A continuación, agregamos el queso quark y batimos de nuevo hasta incorporar.
  5. Tamizamos la harina junto con la levadura química y un pellizco de sal y la agregamos al recipiente. Con cuidado y suavidad continuamos batiendo hasta que no queden grumos.

Momento de la fritura

  1. Calentamos abundante aceite de girasol en un cacito. La temperatura ideal de fritura es 170ºC, ligeramente por debajo de lo habitual. Esto es necesario para conseguir que los buñuelos queden bien fritos en su interior y no se arrebaten por fuera. Un termómetro de cocina ayudará a conseguir el punto ideal del aceite.
  2. Preparamos una fuente o plato amplio con papel absorbente y empezamos a formar y freír los buñuelos.
  3. Con una cucharita pequeña tomamos una porción de masa y la dejamos caer, ayudándonos de otra cucharita, en el aceite caliente. Hay que procurar formar bolitas lo más esféricas posible, pero tampoco pasa nada sí no lo conseguimos.
  4. Freímos los buñuelos en pequeñas cantidades, de cuatro en cuatro o de cinco en cinco -según el tamaño del cacito que usemos- para evitar que el aceite pierda temperatura y mantener constante los 170ºC.
  5. Mientras están en el aceite los movemos suavemente con ayuda de una espumadera para que giren y se doren por todos sus lados de manera uniforme.
  6. Cuando alcancen un bonito tono tostado, los retiramos del aceite y los depositamos en el plato con papel absorbente.
  7. Mezclamos abundante azúcar con una pizca de canela molida y rebozamos en ello los buñuelos recién fritos.
  8. Repetimos la operación cuantas veces sea necesario hasta terminar con la masa.
  9. Servimos los buñuelos con unos vasos de leche, un café, infusión o la bebida que más nos guste o apetezca en ese momento. Son ideales para la merienda y están de rechupete.

Consejos para unos quarkinis o buñuelos de queso crema perfectos

  • Si preferís domar un poco mejor la masa podéis omitir el agua para que quede más sólida, pero los buñuelos quedarán más densos y menos tiernos y esponjosos.
  • Es importante mantener una temperatura constante con el aceite en el momento de la fritura para que los buñuelos no se arrebaten, en caso de ser demasiado alta, ni absorban demasiado aceite, en caso contrario.
  • El rebozado final se puede obviar, pues los buñuelos son dulces por sí mismos. En caso de querer hacerlo conviene que se realice inmediatamente después de la fritura, cuando todavía están calientes. Así se adhiere mucho mejor.
  • Encontrar quark en el supermercado no es siempre fácil. Afortunadamente, este queso se puede sustituir por cualquier otro queso crema o de untar y quedan igual de buenos.
Hemos trabajado 2 horas y 50 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

60 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.

Ilustración

5/52 votos


Categorías: Recetas de Carnaval Recetas de dulces tradicionales Recetas de postres originales Recetas de postres y dulces Recetas fáciles y rápidas Recetas para niños Recetas por ocasión

Etiquetas:

También te encantará...


Sobre el autor

Cuéntame qué tal te ha salido la receta, anécdotas, trucos o preguntas. Leo todos los comentarios y respondo siempre a las dudas. Firmado: Alfonso.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Recetas de Rechupete » Recetas por ocasión » Recetas de Carnaval » Quarkinis o buñuelos de queso crema. Un dulce de Carnaval