Pilotes de Sant Joan. Exquisitas albóndigas con salsa de avellanas

Para 4 2.75€/pers. 247kcal/100g

Recetas de albóndigas hay muchas, pero estas son especiales porque van acompañadas de una exquisita salsa de avellanas. Se trata de las pilotes de Sant Joan, que es como llaman a las albóndigas en Baleares y algunas zonas de la costa este española, y son típicas de la isla de Menorca. Es un plato tradicional que se prepara durante la festividad de San Juan, entre los días 23 y 24 de junio, pero estas también son las recetas que no pueden faltar.

Su elaboración es sencilla, lo más tedioso es formar las albóndigas. Pero una vez hecho esto, la cosa es coser y cantar. Estas albóndigas se cuecen en agua y no se fríen, como suele ser el caso de muchas otras recetas de albóndigas, lo que las hace más ligeras y digestivas. Al agua de la cocción se le añade una picada de avellana, ajo, galleta y yema de huevo que la transforma en una salsa deliciosa y exquisita.

Sea como fuere, este es un plato ideal para disfrutar en cualquier momento del año -no solo en San Juan- y que tiene todas las de triunfar. Es sabroso y bienvenido por todos. Solo te recomiendo que hagas mucha cantidad porque la vas a necesitar. También puedes aprovechar para cocinar otras recetas típicas de San Juan como la coca de San Juan con frutas escarchadas, el postre manjar blanco o la coca de sardinas. ¡A cocinar!

Receta Pilotes de Sant Joan

Preparación de las albóndigas

1. Empezamos preparando la mezcla de carne para los pilotes o albóndigas y, para ello, introducimos la carne picada en un recipiente amplio.
2. Pelamos y picamos finamente la cebolla y también el diente de ajo, aunque este último lo podemos rallar para que quede bien fino, como un puré.
3. Agregamos la cebolla y el ajo al recipiente con la carne.
4. Incorporamos también el pan rallado, sal y pimienta negra al gusto. Sí queremos dar un toque extra de sabor, también podemos añadir media cucharadita de tomillo seco.
5. Mezclamos bien todos los ingredientes hasta conseguir una masa homogénea.
6. Ahora toca formar las albóndigas y, para ello, cogemos trozos de la mezcla anterior y los boleamos con las dos manos.
7. Ponemos la harina en un plato o fuente amplia, en una capa fina por toda la superficie, y vamos colocando las albóndigas sobre ella según estén boleadas. Hay que procurar que tengan un tamaño similar y que no sean muy grandes.
8. Meneamos el plato o fuente para que las albóndigas se cubran de harina por todos lados.
9. A continuación llenamos una cazuela, preferiblemente de barro, con el agua que indicamos en el listado de ingredientes y la llevamos a ebullición.
10. Cuando el agua rompa a hervir añadimos sal, bajamos un poco el fuego para evitar que burbujee en exceso y agregamos las albóndigas, pasándolas antes por clara de huevo.
11. Mientras las albóndigas cuecen en el agua preparamos una picada con la que formamos la salsa.

Preparación de la salsa

1. En un mortero o en una picadora (que es lo que he usado yo) trituramos las avellanas, las galletas María y el diente de ajo.
2. Después agregamos la yema de huevo y trituramos o mezclamos bien hasta obtener una masa homogénea que llevamos a la cazuela con las albóndigas.
3. Removemos para que se integre bien la picada con las albóndigas y cocemos el conjunto unos 10 minutos a fuego suave o hasta que la salsa espese Al principio parecerá que esto no va a ocurrir nunca, pero la salsa va tomando cuerpo lentamente y se vuelve más y más cremosa según pasan los minutos.
4. Es costumbre servir los pilotes o albóndigas de San Juan sobre unas rebanadas de pan payés, aunque se pueden presentar de muchas maneras y con todo tipo de guarniciones: ensalada, arroz blanco, verduras, puré de patatas,… De cualquier manera están de rechupete.

Consejos para unos pilotes de Sant Joan perfectos

• Para que las albóndigas queden más suaves y jugosas agrega una cucharada de aceite de oliva virgen extra a la mezcla de la carne.
• Cuando prepares las albóndigas no las amontone, deja que tengan su espacio. En caso contrario, se te acabarán pegando unas con las otras y perderán su forma y su encanto.
• Una forma de que no se te pegue la carne a las manos a la hora de formar las albóndigas es mojarlas para que queden húmedas (no tienen que estar chorreando, solo húmedas).
• Al igual que hago con las croquetas, siempre preparo albóndigas de más. Mucha cantidad para luego poder congelar. Así cualquier otro día que esté apurado de tiempo tengo un túper estupendo preparado de comida y me despreocupo.
• Para una salsa más ligera, agrega un poco de agua al finalizar la cocción ajustando el espesor a tu gusto.
• Aunque es opcional, el tomillo aporta un toque de sabor a campo muy rico a estas albóndigas. Mi recomendación es que lo uses si lo tienes a mano.

Hemos trabajado 2 horas y 50 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

60 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.

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Etiquetas: agua ajo avellanas carne picada clara de huevo cocina española galletas yema de huevo

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